Primeras imágenes de David Tennant como el exespía ruso Alexander Litvinenko
La serie recrea cómo el envenenamiento con polonio de Litvinenko en noviembre de 2006, desencadenó una de las investigaciones más complejas y peligrosas en la historia del Reino Unido
El aclamado actor David Tennant (Doctor Who, Broadchurch) ya ha dejado entrever que no queda mucho para que podamos disfrutar de su próximo proyecto televisivo: la miniserie Litvinenko. Hasta que eso ocurra nos recrearemos con las interpretaciones de Tennant y Stanley Tucci en el thriller Desde dentro (Netflix).
Como decíamos al inicio, David Tennant recupera para la pequeña pantalla la sórdida muerte de Alexander Litvinenko, antiguo miembro de los servicios de inteligencia rusos, al que envenenaron en 2006 un hotel de Londres con polonio radiactivo 210.
Aunque el Kremlin siempre ha negado cualquier participación en el asesinato del exespía, la viuda de Litvinenko, Marina, llevó el caso al tribunal de derechos europeo. Ahí es donde la ficción pone el foco: en la batalla incansable que emprende Marina para poner nombres y apellidos a los asesinos de su marido y reconocer el papel que jugó Rusia.
«El asesinato de Litvinenko no fue solo para silenciarlo, ya que había formas más rápidas y sencillas que echándole polonio en el té», explica Mark Galeotti, experto en asuntos de seguridad rusos. La intención de Vladimir Putin, prosigue el experto, era poner a Litvinenko «como ejemplo para el conjunto de expatriados y rusos emigrados a Londres». El mensaje era: «Que estéis ahí no significa que estéis a salvo», comenta Galeotti.
Litvinenko, crítico abierto del presidente Putin, murió 22 días después de que le envenenasen. Sabía que no le quedaba mucho tiempo. Hasta ese momento, se la pasó, desde una cama de hospital, concediendo entrevistas y aportando detalles meticulosos a la policía de todo lo que sabía. «Le prometí a Sasha que un día la gente sabría la verdad sobre él», añade su viuda.
Las imágenes de Litvinenko en cuidados intensivos, sin pelo y con una apariencia demacrada dieron la vuelta al mundo. Antes de morir quería que el mundo viese lo que Putin era capaz de hacer. Esa instantánea quedó grabada en la memoria colectiva y desde la productora han replicado a la perfección ese momento con David Tennant como un Litvinenko postrado en su lecho de muerte.