La película favorita de Scorsese que inspiró una aplaudida escena de 'Uno de los nuestros'

Como cineasta, es posible que Martin Scorsese haya visto más películas que cualquier otra persona de a pie, lo que se traduce también en un conocimiento enciclopédico del medio que le permite inspirarse siempre que quiere. Sin embargo, como en todo, siempre hay ciertas predilecciones y en su caso concreto existe un filme de John Wayne que proyecta sobre su filmografía una sombra mucho más alargada que cualquier otra vista.

Ha pasado casi medio siglo desde que El Duque falleció, pero eso no impide que siga siendo una de las figuras más imponentes de Hollywood. Incluso la gente que no ha visto ninguna de sus películas sabe quién es y el ideal arquetípico de heroísmo con el que se asocian sus personajes.

En este sentido, son muchos los autores que, a lo largo de los años, han querido incluir esa distinción en sus propios proyectos. Desde Steven Spielberg y George Lucas a James Cameron y Ridley Scott, infinidad de cineastas señalan las películas de Wayne —en particular los westerns que rodó junto a John Ford— como fundamentales para dar forma a su estilo propio de dirección, creatividad y autoría.

Scorsese no iba a ser menos y se une a sus compañeros de profesión para alabar a John Wayne y a Centauros del desierto como la película por la que decidió hacerse cineasta. Como el cerebro detrás de Malas calles, Taxi Driver, Uno de los nuestros, Toro Salvaje, Gangs of New York o El lobo de Wall Street, el múltiple ganador del premio Oscar ha elogiado los méritos de la película en innumerables ocasiones a lo largo de los años, celebrando cada fibra de su ser, desde su asombrosa cinematografía, hasta la forma en la que Wayne convierte a Ethan Edwards en el mejor personaje de su carrera.

La influencia no ha sido particularmente sutil, ya que su ópera prima, ¿Quién llama a mi puerta?, contiene una escena en la que Harvey Keitel habla de Centauros del desierto antes de que se vea proyectada en un fotograma de la misma. Pero no ha sido la única alusión que ha hecho en su filmografía.

En su día ya confesó que, en Taxi Driver, el viaje de redención de Travis Bickle se basó, en parte, en el arco de redención de Ethan, desde ese extraño insensible a un alma arrepentida con una brújula moral férrea. En realidad, muchos de los personajes creados por Scorsese se parecen bastante a Ethan, con esa propensión a la violencia por bandera y con el egoísmo a expensas de sus relaciones personales.

Sin embargo, la presencia más evidente de su carrera se ubica en Uno de los nuestros. ¿Es posible que un western inspire una película de gánster? Para el maestro del cine americano, sí. «¿Sabes la escena de Centauros del desierto donde Ward Bond llega a la casa y dice: 'Vamos a tomar un poco de ese café'? Inspiró la escena con mi madre en Uno de los nuestros», confesó en una entrevista a Indie Wire, compartiendo que, incluso, durante el proceso de casting tenía la obra maestra de Ford y Wayne en el fondo de su mente para elegir a actores similares.

Su objetivo era lograr el mismo tipo de familiaridad que Ford consiguió entre Bond y el clan Edwards. «El sentimiento de familia, de camaradería, de diálogos superpuestos... toda esa maravillosa acción que sucedía en la casa, de preparar el desayuno, con los niños levantándose y todos bromeando entre sí...», explica, «todo eso era tan cálido y tan hermoso que dije, bueno, es natural que hagamos lo mismo».

Así nació una de las escenas más aplaudidas de la película, cuando eligió a su propia madre Catherine para que actuara junto a Ray Liotta, Robert DeNiro y Joe Pesci. En ella, el trío protagonista entra en casa de este último a buscar una pala. Su madre se sobresalta y, al ver a su hijo y sus dos compañeros de fechorías, a altas horas de la madrugada, se ofrece a hacerles la cena mientras la última víctima de todos ellos patea el maletero del coche en el que está metido intentando huir. Calidad cinematográfica en estado puro.