Fundado en 1910
Chichén Itzá, una de las siete maravillas del mundo moderno

Chichén Itzá, una de las siete maravillas del mundo moderno

Protestas en las ruinas mexicanas de Chichén Itzá: los mayas critican los «abusos de poder» de las autoridades

Los indígenas mantienen bloqueadas las vías de acceso a la ciudad prehispánica, dejándola sin turistas y ocasionando pérdidas millonarias en uno de los más visitados centros arqueológicos del país

Durante más de 30 horas permanecieron bloqueados los puntos de acceso a la zona arqueológica de Chichén Itzá, considerado una de las siete maravillas del mundo moderno y que congrega a millones de turistas de todo el mundo, con el objetivo de pedir la destitución de Marco Antonio Santos Ramírez, director de la zona arqueológica desde 2014.

La comunidad indígena de Chichén Itzá le considera responsable de todos sus males: los comerciantes no pueden vender sus artesanías, a los guías turísticos les niegan la entrada y los campesinos no pueden sembrar en tierras que han sido históricamente suyas. Desde el pasado lunes se ha iniciado una batalla por la «recuperación» de estas ruinas encabezada por las comunidades de Pisté, Xcalokoop y San Felipe, poblaciones de Yucatán donde se asienta la zona, que se manifestaban con pancartas en las que se podía leer: «Chichén Itzá frena y reprime el desarrollo de las comunidades mayahablantes», «no más robo y negocios corruptos del directos de Chichén Itzá» y «no más abuso de autoridades contra guías turísticos», según informaba La Jornada Maya.

Al respecto, José Arturo Chab Cárdenas, titular del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Yucatán, informó que, a pesar de estas movilizaciones, la zona arqueológica seguirá abierta al público.

«Este miércoles demostraremos el apoyo que nos brindan ejidatarios de otras comunidades, ya no podemos seguir tolerando el abuso de poder de ese personaje que atenta contra la cultura maya y nuestras costumbres milenarias, como hablar nuestra lengua materna y sembrar la milpa», expresó el comisario de Pisté, Armando Dzul Mex.

El subdelegado de Gobernación en Yucatán, Juan Cristóbal Orozco, afirmó que intentó acercarse a los manifestantes para entablar una mesa de diálogo para poner fin al conflicto que empieza a generar millonarias pérdidas económicas al INAH y a la administración del gobernador Mauricio Vila, a través del Patronato de las Unidades de Servicios Culturales y Turísticos (Cultur).

Pérdidas millonarias

El cierre de la carretera Valladolid-Mérida, a la altura de Xcalacoop y Pisté, afecta a los turistas, aunque la zona arqueológica de Chichén Itzá sigue abierta y resguardada por 50 agentes de la Guardia Nacional, quienes llegaron al lugar para evitar que los indígenas tomasen el acceso principal a la milenaria ciudad maya. Las pérdidas al día por el bloqueo serían de 2.6 millones de pesos, ya que en promedio entran de tres mil a diez mil personas, según ha explicado el director del INAH Yucatán.

La dependencia aseveró en un comunicado que las inconformidades se derivan de las «acciones de ordenamiento» de más de una década respecto a la regulación del comercio informal que ha invadido el área, por lo que rechazó cometer actos de discriminación a los pueblos originarios.

Chichén Itzá fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1988 por la Unesco y famosa mundialmente por el juego de luces y sombras que se proyectan sobre la escalinata del basamento piramidal cada equinoccio. Como sucede en otras zonas arqueológicas como Palenque, en Tabasco, desde la entrada y a lo largo de los edificios arqueológicos hay puestos de comerciantes ofreciendo a turistas nacionales y extranjeros diversas artesanías, ropa, instrumentos, esculturas y demás productos relacionados con las culturas prehispánicas.

comentarios
tracking