Queda desierta la subasta del único mural de Caravaggio por 350 millones de euros
El juez había ordenado la subasta porque los herederos del último propietario, Nicolò Boncompagni Ludovisi eran incapaces de mantener la Villa Aurora y debían saldar una deuda con Hacienda
La Villa de la Aurora de Roma, el palacio con el único mural de Michelangelo Merisi Caravaggio, que salía a subasta por orden judicial a un precio base de 353 millones de euros (unos 400 millones), finalmente, ha quedado desierta.
La subasta, que había suscitado la atención del mercado nacional e internacional, se celebraba hoy a las 15.00h, pero la falta de interés de los inversores ha hecho cerrar la subasta hasta el próximo día 7 de abril, en el que se volverá a abrir la puja, aunque partiendo de un precio rebajado el 20%.
A subasta por deudas con Hacienda
La Villa de la Aurora, que es la residencia histórica de la familia Ludovisi, cuna de cardenales y hasta de dos papas a lo largo de la historia, salía a subasta porque los herederos de su último propietario, Nicolò Boncompagni Ludovisi, fallecido en 2018, eran incapaces de mantenerla y debían saldar una deuda tributaria.
Este palacio, de seis plantas y rodeado de un gran jardín, es todo un tesoro debido a que en el techo de una de sus salas esconde el único mural que se conoce de Caravaggio: la representación de los dioses Júpiter, Neptuno y Plutón.
Actualmente vive la actriz Rita Jenrette
Además, cuenta con numerosas obras de arte, como el fresco que da nombre a la villa, La alegoría de la Aurora, obra de Guercino, máximo exponente del barroco romano, así como de otros pintores como Dominichino, Paul Bril o Giambattista Viola.
Hoy en día, en la villa vive la actriz estadounidense Rita Jenrette, viuda del aristócrata Nicolò Boncompagni Ludovisi, de quien recibió también el título de princesa.
El juez había determinado el precio en 353 millones de euros (unos 400 millones de dólares), aunque el perito lo elevó a 471 millones (unos 530 millones de dólares), mientras los historiadores insisten en su valor incalculable.
En los últimos días se había lanzado una campaña a través de Change.org para que el Estado italiano se hiciera con este palacio debido a su altísimo valor histórico y cultural; incluso el fundador de Microsoft Bill Gates, llegó a ofrecer unos 200 millones de dólares hace quince años. Sin embargo, según la legislación, el Estado sólo puede ejercer el derecho de preferencia dentro de un plazo de sesenta días después de que un particular haya adquirido la propiedad y por una cifra más alta.
Por el momento, el Gobierno no había aludido a esta posibilidad, quizá para no interferir en el curso de la subasta, aunque fuentes del departamento de Cultura señalan que el precio de salida equivale a una quinta parte del presupuesto ministerial de un año. Así que habrá que esperar hasta a abril para comprobar si alguien se atreve a pujar por la villa, y si el Estado italiano secunda la propuesta popular de hacerse con la propiedad.