Ensayo / Historia
Un viaje al mundo soviético, desde la mirada de la vida cotidiana
Hace treinta años desapareció el mundo soviético. Los supervivientes de aquella época nos describen cómo fue la vida del ciudadano corriente en aquella época.
GALAXIA GUTEMBERG / 928 PÁGS.
El siglo soviético
El historiador alemán Karl Schlögel, especializado en la historia de Rusia y del estalinismo, docente en la Universidad Europea Viadrina (Frankfurt del Oder) nos tiene acostumbrados a obras de gran calado, como fue su anterior aportación en Acantilado Terror y utopía. Moscú en 1937 por el cual recibió en 2012 el Premio de Leipzig. En esta ocasión, «El siglo soviético» nos devuelve el amplio conocimiento del investigador germano de una manera novedosa.
Su libro no es una descripción académica de lo acontecido bajo el régimen soviético en la URSS, desde su posición de experto sovietólogo. Por el contrario, siguiendo la línea del periodista polaco Ryszard Kapuściński en El Imperio donde se introdujo en la entraña de la URSS desde la convivencia del ciudadano de la calle y los recuerdos escondidos en su alma de niño, Karl Schlögel hace lo propio a través de los aperos de la vida cotidiana del ciudadano común soviético.
La extensa obra se abre al lector como un enorme campo arqueológico, donde su cuadrante se va analizando de forma ordenada por cada capítulo. El autor, a través de los utensilios supervivientes de época, clasifica y construye tipologías que nos ayudan a reconstruir lo que fue la vida en la URSS desde el punto de vista cotidiano. A través de sus páginas, Schlögel narra la desaparición del mundo regido por el zar, y la configuración de un nuevo mundo, que significó la destrucción, marginación y eliminación de muchos muebles y utensilios, considerados como símbolos burgueses, como fueron los retretes de porcelana o los jarrones del siglo XVIII. Ese simbolismo mobiliario visualiza al mismo tiempo la desaparición de las antiguas elites de la sociedad zarista, convertidos en colonos del lejano norte ártico junto a prostitutas y delincuentes, todos unidos en una redención a través de la esclavitud.
Uno de los imprescindibles a la hora de entender cómo fue la sociedad soviética desde la revolución rusa hasta la desaparición de la URSS
La instauración de una nueva sociedad trajo nuevas costumbres, la descripción de ese proceso de cambio profundo, de una sociedad rural y atrasada, a otra en la modernidad, urbana e industrial. La descripción se realiza a través de una exhaustiva narración de detalles en múltiples áreas, como la música, la laboral, la represiva o la educativa. Todas ellas demuestran el alto conocimiento del autor, que convierte su libro en uno de los imprescindibles a la hora de entender cómo fue la sociedad soviética desde la revolución rusa hasta la desaparición de la URSS después del fracasado golpe de estado contra Mijail Gorbachov.
Aunque salen los grandes protagonistas de la URSS, si es cierto que la investigación se asienta sobre la amplia base de la vida cotidiana, cuyo detallismo y contundencia nos introduce en la vida diaria del ciudadano soviético común.
«Hacer cola»
El libro guarda una interesante distancia, pero sin ocultar nada, del mismo modo que nos descubre la transformación industrial y arquitectónica de la patria del proletariado, también nos descubre las sombras que ocultan los pliegues del poder soviético, el mundo de la disidencia, los desaparecidos, los muertos vivientes en el gulag y los expulsados sin derechos, como almas errantes en un mundo que no es el suyo.
Según se va uno introduciendo en las páginas de este libro extenso, pero de ritmo regular y a la velocidad del tren que impide bajarse de él, el lector va descubriendo la profundidad del conocimiento del autor, al no centrarse exclusivamente en los aspectos exteriores, sino en saber explicar la verdad intrínseca que esconde algunos comportamientos como «hacer cola», que no es un hábito ordenado para adquirir un producto, sino que esconde en sí mismo el ritual de iniciación en el ser soviético, donde el tiempo se ve secuestrado en una línea de tiempo paralela. Las biografías, memorias y literatura de época ayudan, con sus textos, a proporcionar la elasticidad que la narración necesita para seguir manteniendo la atención del lector.
En conclusión, es un libro importante para entender como desde el mínimo detalle se puede descubrir los trazos que hagan comprender las largas líneas de la historia de Rusia en el siglo XX. Desde el imperio zarista, pasando por la URSS y su desembocadura en la Federación rusa de Vladimir Putin, Karl Schlögel nos proporciona los instrumentos necesarios para interpretar cuales serán las líneas de la Rusia del presente.