¿Por qué suena sin parar 'El burrito sabanero', el villancico del XXI?
Es una canción venezolana compuesta en 1972 que en la versión de un niño alcanzó la popularidad
Los niños de hace décadas no lo habían escuchado nunca. Son los niños de ahora quienes lo hacen como si fuera el Campana sobre campana. Puede decirse que El burrito sabanero es una especie invasiva, casi como, incluso sonoramente, la cotorra argentina, en vez de por lo ornitológico, por lo musical navideño.
Ahora lo canta Bisbal en su buen disco navideño y la ocupación es total. Los primeros ecos se empezaron a escuchar en los colegios, en los festivales de Navidad. Era un villancico diferente, y tanto. Es como el reguetón del villancico que viene de Venezuela en vez de Puerto Rico.
Por eso no lo habíamos escuchado nunca antes en España. Los ritmos caribeños han cruzado el Atlántico y se sienten hasta en Navidad. Y de tanto ponerlo, cada vez más, su melodía bailable se ha entremetido en el tuétano de estas fechas de tal forma que ya no hay Navidad sin el burrito en cuestión.
Una canción que en realidad no se llama así, sino El burrito de Belén, escrita por Hugo Blanco en 1972. El sonido más famoso del tema vino (y continúa) por la versión del niño Ricardo Cuenci en 1975, acompañado del coro La rondallita, al que pertenecía.
Raphael popularizó en España y El tamborilero, artistas suramericanos como Elvis Crespo o Juanes hicieron los mismo con el Burrito, la canción incluida por Billboard entre las cien mejores canciones navideñas de todos los tiempos sin que en España nos hubiéramos enterado nunca. Hasta ahora y en toda clase de versiones y ritmos. Por suerte o por desgracia.