Casi cayó Alemania, pero donde esté el play off...
La Eurocopa está bien, es bonito vernos las caras cada cuatro años, los de la Unión y el resto. Pero no, no son los play off que es la maldad químicamente pura, el corazón a tres mil por hora, el sinvivir
Sí, sí. A falta de nada nos íbamos a ver con Suiza en cuartos. Porque los octavos los ganamos, claro. Los paisanos de Federer estaban a un paso del primer gran golpe en el torneo, pero los alemanes pusieron un 9 de verdad, quitaron al falso ídem, esa broma: cabezazo y gol. El tal Füllkrug, minuto 90.
¿El culo alemán? No. El fútbol de toda la vida. Otra prueba más de lo maligno de los entrenadores y los que les tocan las palmas. Sale usted como Dios manda y si no le funciona, inventa. Pues lo hacen al revés. Al final, centro y cabezazo. Como en 1883. Antes de Cristo, digo.
Y como un guiño más al fútbol de toda la vida, Hungría, la de de Puskas, Kocsis, Czibor y tal, le ganó a Escocia también en el 90 y puede clasificarse. Todo lo que sea ver ganar a los húngaros me satisface. Primer grupo resuelto. ¿Y? Ningún complejo español ante esta Alemania, ninguno. Que sí, que sí, que de fácil nada. Claro, será en un cruce, el mata-mata que dicen los brasileños. Pero prefiero haber nacido en Barcelona que en Berlín ahora mismo.
Pero el número del día, lo grande, fueron los play off, esa obra de un sádico. En Segunda juegan 42 partidos y del tercero al sexto se destrozan buscando la tercera plaza de ascenso. El que gana ha jugado 46, hay condenas más cortas.
¿Por qué no suben los tres mejores? Pues porque cuando así se hacía acostumbraban a pasar cosas raras en la recta final. En la pelea se metían cinco, seis a lo sumo, con lo que media docena larga tocaba la gaita las últimas jornadas. Entonces apareció el sádico, sujétame el cubata: metamos a muchos en el lío, un play off hasta el sexto. Así, casi imposible escaquearse. Interesante y salvaje.
El Espanyol cumplió con su tradición: cada vez que descendió volvió al año siguiente. Esta vez vía eliminatorias. Remontó el gol de ventaja que traía el Oviedo con Puado vestido de Tamudo, dos goles en menos de tres minutos. Ha marcado los tres que su equipo ha anotado en estos partidos, uno al Sporting, dos al Oviedo: el tío más popular en Asturias no es. Un partido de terror para pericos, oviedistas y todos los que deseaban el mal a unos y/o otros. Ah, el sádico...
Y después, el Córdoba que también ha jugado mil partidos esta temporada. Le ganó al Barça B y vuelve a la LFP. Otro sufrimiento conejil. 1-1 en la ida, gol azulgrana y remontada andaluza. No estaba siendo el año del Barça, el gafe ha perseguido hasta a su filial, equipo con muy buenos futbolistas por cierto. Y lo del Málaga: Andalucía es una fiesta.
La Eurocopa está bien, es bonito vernos las caras cada cuatro años, los de la Unión y el resto. Pero no, no son los play off que es la maldad químicamente pura, el corazón a tres mil por hora, el sinvivir. Y ya, España-Albania. Habrá mil cambios. Sólo queda por conocer el rival en octavos. Que por lo que se lee y oye será como ir a cobrar lotería. Miau.
