El penalti de Camavinga sobre Gavi que pitó el VAR en la final de la Supercopa de España

Ya tenemos la primera polémica de la final de la Supercopa de España entre el Real Madrid y el Barcelona. En el minuto 34, cuando el partido iba 1-1 después de que Kylian Mbappé adelantara en el minuto 5 a los blancos y Lamine Yamal pusiera las tablas en el 22, una acción dentro del área del Madrid entre Gavi y Camavinga hizo que el VAR llamara a Gil Manzano por un posible penalti.

En directo el colegiado extremeño no apreció nada y ordenó al centrocampista azulgrana que se levantara. El Real Madrid recuperó el balón y comenzó a construir su jugada mientras Gavi seguía tendido en el suelo y se levantaba para reprochar la acción a Gil Manzano, que paró el juego y se echó la mano a la oreja esperando instrucciones de Iglesias Villanueva, que le pidió que acudiese al monitor a revisar la acción.

La jugada en cuestión no iba a ninguna parte. En una acción sin aparente peligro, Gavi le gana la posición a Camavinga y este le da un plantillazo sin demasiada fuerza en el muslo. En ningún momento estuvo en peligro la integridad física del mediocentro andaluz, pero Gil Manzano corrigió su decisión inicial y consideró que era penalti y amarilla para el francés.

Con el reglamento en la mano se puede pitar penalti aunque es más discutible si el VAR debió entrar o no, pues se podría no considerar como un error claro y manifiesto. Sea como sea, Robert Lewandowski no falló desde los 11 metros y dio la vuelta al marcador. El polaco no tiró el penalti como acostumbra y se ahorró la paradinha para despistar a Thibaut Courtois, que adivinó el lado pero no le dio tiempo a llegar.