El plan Pintus para poner a punto a Mbappé tras días con problemas para comer

Kylian Mbappé estaba molesto, casi enrabietado. La dentadura le dio muchos problemas en el momento decisivo de la temporada, en la Champions, el torneo que siempre anheló jugar con el Real Madrid. No se entrenó bien durante varios días y ya vimos frente al Betis que no estaba bien. Fue intervenido para extraerle una muela y los antibióticos hicieron el resto. Se sentía débil y la alimentación tuvo que ser muy ligera, porque no podía masticar bien. No eran las mejores condiciones para ofrecer las prestaciones ideales en el fútbol.

Lo que no esperaba es que también lo acusara ante el Atlético en el partido más importante del curso. No se rehizo físicamente. El cuerpo técnico ha trazado un plan para recuperar al mejor Mbappé en la batalla del Metropolitano, un encuentro que marcará el devenir de la temporada para el campeón de Europa y para el propio Mbappé.

Estaba dolido consigo mismo por no poder aportar lo mejor de su calidad en el derbi y quiere estar a punto en el duelo de vuelta. Antonio Pintus dirige un trabajo físico específico para reeditar el nivel que demostró dos semanas antes, cuando firmó tres goles ante el Manchester City.

Hay que tener cuidado con la dentadura, porque puede afectar a la musculatura. El club escondió lógicamente ese problema cuando el francés saltó al césped en el Benito Villamarín. Hizo veinte minutos muy buenos y después se diluyó, al igual que todo el equipo. Estaba débil y Ancelotti le quitó a los 75 minutos, con 2-1 en contra.

Recuperarle en cinco días

El plan del cuerpo técnico es recuperar su condición física en estos cinco días. Un estado biológico que era bueno hace dos semanas, cuando anotó los tres goles frente al Manchester City, que fueron el broche de dos meses en los que había conseguido diecinueve de sus veintiocho goles con el Real Madrid. «No se le ha olvidado jugar al fútbol», comentan en la casa blanca. El francés sabe que todo el mundo espera que ofrezca lo mejor de sí mismo en territorio comanche, en el Metropolitano, porque ha venido al Real Madrid a ser importante en la Copa de Europa.

Mbappé lleva una excelente trayectoria esta temporada y quiere mejorarla en el derbi de vuelta de la Copa de Europa. Antes toca el encuentro liguero frente al Rayo Vallecano en el Bernabéu. Veremos si 'Kylian', como le denominan sus compañeros, juega ante los franjirrojos o si disputa, en todo caso, parte del partido, pues el duelo europeo tiene la primacía en la visión empresarial de la marca Real Madrid. Lo fundamental para el club y para el cuerpo técnico es que Mbappé ataque la batalla del Metropolitano en las condiciones que demostró ante el City de Guardiola.

La estrella francesa suma 28 goles en 41 partidos y en los dos últimos, derrotado por la dentadura, no ha anotado. Sus promedios son óptimos. Remata 3,1 veces por partido y logra un gol cada cuatro disparos, casi todos protagonizados por su pierna derecha. Kylian desea mejorar esos promedios porque tiene calidad para mejorarlos. Pero ahora solo piensa en superar al Atlético en la Copa de Europa. Desea ser decisivo en la eliminatoria, porque no pudo serlo en el envite de ida en Chamartín.

Sabe que Francia y todo el mundo futbolístico se encuentran vigilantes ante su rendimiento en el próximo envite de la Champions, que dejará a un equipo de Madrid eliminado. Es verdaderamente una final de la Champions que se dirime en octavos. Pintus ha programado un 'plan Mbappé' para que recupere la fuerza perdida en esos 'días bajos de alimentación' y de entrenamiento. «Durante tres días no se entrenó prácticamente nada», dice el cuerpo técnico.

Que dispare a la primera

Sus compañeros le piden que imponga su categoría en el campo siempre y no desperdicie oportunidades de gol por buscar el pase a Vinicius o a Rodrygo. Que sea menos condescendiente y más egoísta, porque su liderazgo lo exige

Tras fallar aquellos penaltis ante el Liverpool y el Athletic de Bilbao cogió las riendas de su destino y el madridismo vio al mejor Mbappé. Ya lleva 28 dianas y los líderes de la plantilla piensan que podía llevar más, porque «muchas veces da pases en vez de disparar». Los veteranos del equipo le dicen que no mire tanto por los demás y que tire a puerta a la primera, nada más recibir la pelota, porque tiene un chut muy certero y sorprende a los guardametas cuando lo hace con rapidez.

Los jefes de la plantilla le piden, en fin, que sea siempre Mbappé, porque su calidad no puede quedar diluida por quedar bien con sus compañeros del ataque. Los 'cuatro magníficos' ya son cinco, porque Brahim se ha sumado al cartel, pero Kylian lleva el nueve de Di Stéfano.