La Montero contra Sánchez
Aseguró que los estudiantes de las universidades privadas compran los títulos. Es decir, Pedro Sánchez, por ejemplo. Incluso Pepe Bono y un buen número de dirigentes sanchistas
María Jesús Montero, conocida como «Lady Juanola», está que se sale. Cada vez que abre la boca, sube el pan. Ayer en Málaga, en el más puro estilo demagógico de la extrema izquierda, que es donde ahora está viviendo el sanchismo, aseguró que los estudiantes de las universidades privadas compran los títulos. Es decir, Pedro Sánchez, por ejemplo. Incluso Pepe Bono y un buen número de dirigentes sanchistas que estudiaron en universidades privadas. Es más, tal afirmación nos viene como anillo al dedo para recordar la tesis plagiada de su jefe de filas, en una universidad privada, por cierto. Así que tenemos a la Montero denunciando a su jefe y recordándonos su gran estafa académica. Hasta aquí la anécdota y el chascarrillo. Ahora, vayamos a lo serio.
Por segundo día consecutivo, María Jesús Montero ha mostrado su verdadero rostro, el de una radical de izquierdas que solo sabe odiar. Cuando hablan de odio, no analizan sus intervenciones. Y también hoy, como hice ayer, tengo que dudar si su intervención viene dada por la ignorancia enciclopédica que demuestra cada vez que habla o realmente ese es su programa: ir contra el mundo privado, que ahora mismo es el único lugar en España donde se guarece el talento.
Las universidades privadas son hoy una gozosa realidad de nuestra España. Se han convertido, además, por su prestigio, en un imán de atracción de jóvenes estudiantes de un dispar número de países. Gracias a su existencia no ha colapsado la universidad pública. Pasa en la enseñanza como en la sanidad: la demanda tan alta que hay en España de enseñanza y sanidad pública se ve atendida merced a que millones de españoles pueden acudir a hospitales privados y formarse en universidades privadas.
Si el nacionalismo se cura viajando, la ignorancia también. Solo en Los Ángeles hay más de 300 instituciones educativas superiores, en Boston ciudad nada menos que 24 y, en su estado, se superan los 100 centros universitarios. En ellos se investiga, se estudia, se progresa en el sentido más primigenio de la expresión y la humanidad avanza en esos pozos de cultura y conocimiento. No es el caso de España, desgraciadamente, que apenas tenemos premios Nobel, pero que, con políticas como María Jesús Montero, estamos más cerca de Venezuela o Ruanda que de los muy democráticos Estados Unidos.
La ignorancia se cura viajando y estudiando. Todavía está a tiempo Montero de mejorar. Solo hay que poner los codos. Mientras, Sánchez se estará preguntando si su licenciatura y su doctorado son válidos, están comprados… A tenor de lo dicho por su ministra de Hacienda, quien después de cargarse siglos de avance y progreso del derecho, ahora quiere cargarse la iniciativa privada y la enseñanza de calidad.