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Nasser Al Khelaïfi y Florentino Perez durante el último enfrentamiento entre franceses y madridistas

Nasser Al Khelaïfi y Florentino Pérez, durante el último enfrentamiento entre parisinos y madridistasGTRES

Champions League

PSG-Real Madrid: el eterno y millonario «aspirante» contra el rey de Europa

Un polémico sorteo realizado dos veces deparó un emparejamiento con mucho morbo. PSG y Real Madrid volverán a verse las caras cuatro años después de su último duelo. En esa ocasión los blancos apearon a los parisinos gracias a Marco Asensio. El balear apunta al once y podría ser de nuevo la bestia negra parisina.

El Madrid se reencuentra con su competición fetiche, aquella que todo jugador y aficionado sueña con jugar y ganar. Aquella donde los blancos son los auténticos reyes. Nadie aglutina tantas 'orejonas' como el club madridista.

El PSG llega a la cita, tirando de victimismo y siendo calificado por Mauricio Pochettino, su actual entrenador y perpetuo aspirante al banquillo blanco, como «un aspirante». Un eterno «aspirante» que cada verano protagoniza el mercado de fichajes.

Con una plantilla hecha a golpe de talonario y con medidas elásticas para poder «cumplir» el Fair Play financiero. Un grupo confeccionado para ganar Champions y no Ligas francesas. Sin embargo, desde el año 2011 Nasser Al-Khelaifi, el hijo de un pescador de perlas en Doha, fue designado por el emir de Catar para cumplir sus deseos desde la presidencia, el club no ha levantado ninguna Champions. Lo más cerca que estuvo de ello fue el año 2020, cuando el Bayern les privó de conseguir su ansiada orejona. Su palmarés está lleno de Copas de Francia y Ligas Francesas, sin embargo, vacío de Champions. Quizás por eso, Kylian Mbappé esté contando los días para cambiar París por Madrid.

Rey de Reyes

En frente, estará el Real Madrid, el equipo más laureado de la competición. Trece trofeos adornan su extensa vitrina. Cuatro conseguidas en cinco años. Un hito que ningún club ha conseguido hasta la fecha. Los madridistas llegan con Carlo Ancelotti, el técnico que abandonó París para ser campeón de Europa como general del pelotón, y con un Karim Benzema que ha trabajado «mañana, tarde y noche» para estar sobre el césped del Parque de los Príncipes. Tres semanas fuera en la que su equipo le ha echado mucho de menos. Karim está de vuelta y como afirmó durante la previa: «Siempre voy a forzar por mi equipo». Unas palabras que resuenan como la mejor melodía para tranquilizar a una afición huérfana de goles y deseosa de celebrar los suyos.

El rey de Europa frente al eterno aspirante. Es la hora de hablar sobre el césped.

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