Osasuna 1-2 FC Barcelona
Pedri y Raphinha rescatan del alambre a un Barça que amarra el liderato antes del Mundial
Los culés, que jugaron con diez desde la primera media hora, culminaron la remontada a cinco minutos del final
El Barça saltaba al césped de El Sadar defendiendo un liderato que le llegó por puente aéreo tras la caída del Real Madrid en Vallecas. Xavi no concedió a Piqué su último baile, y el central empezó en el banquillo para terminar expulsado en el descanso por protestar a Gil Manzano. El central del Barça decía adiós igualando el récord de expulsiones en el Barça que hasta el momento estaba en manos de Stoichkov.
Los primeros minutos, los culés se dedicaron a domar el encuentro y no salieron de su campo.
Osasuna golpeó primero
Sin embargo, un error de Busquets en su campo propició el primer aviso navarro a los culés.
El aviso se convirtió en realidad, cuando un minuto después, David García enviaba a la red un cabezazo inapelable con el que Ter Stegen solo pudo recoger la pelota desde dentro de su portería.
Como si fuera la continuación de lo vivido en Vallecas, Osasuna, de carácter muy similar al del Rayo, arrollaba en intensidad a los culés como lo hicieron los de Iraola un día antes a los blancos.
Con el gol, el Barça entró en 'modo prisas' y los culés con precipitación sufren en exceso.
La respuesta culé tuvo que esperar a los 22 minutos cuando Balde probó fortuna desde fuera del área.
Lewandowski intentó sorprender a Aitor Fernández, pero el portero del equipo navarro no cayó en la trampa de la vaselina del polaco. Corría el minuto 24 cuando los de Xavi hicieron su primer tiro a puerta.
Lewandowski se autoexpulsó
Los nubarrones se tornaron en tormenta cuando, en el minuto 32, Lewandowski se autoexpulsó con un codazo a David García fuera de lugar. Si el Barça sufría para crear juego con once jugadores, se antojaba más difícil todavía con diez. Casi imposible si tenemos en cuenta que quien se iba era su máximo realizador.
Lewandowski se marchó del césped haciendo un gesto más que polémico hacia Gil Manzano que los entendidos aseguraron que en países como Alemania tiene un significado de «engreído»
Osasuna aprovechó su superioridad numérica para intentar poner en más problemas a los de Xavi Hernández. Torró y Moi probaron suerte desde fuera del área sin suerte.
Dembélé, en ausencia de 'Lewi', decidió echarse el equipo a la espalda, pero se encontró una y otra vez con el impedimento de Aitor.
Quien sí vio puerta fue Ferran Torres, pero su cabezazo fue anulado por fuera de juego.
Llegaba el descanso con el Barça volcado en busca del empate y con Osasuna heredando el papel de domador con el que comenzaron los culés.
Pedri marcó el camino
La segunda parte comenzó como acabó y los hombres de Xavi tuvieron su premio nada más comenzar gracias a un gol de Pedri que remató una gran envío desde la derecha. El tanto dio tranquilidad al Barça y sembró las dudas en Osasuna, pese jugar con uno más.
Los navarros se quitaron las telarañas en ataque en el minuto 60 cuando un centro envenenado de 'Chimy' Ávila se quedó a punto de rematarlo Aimar.
Raphinha asegura el liderato
El propio Chimy obligó a Ter Stegen, en el minuto 70, a lucirse con un disparo lejano que a punto estuvo de sonrojar al equipo culé. Los de Xavi parecían confiados en que su opción llegaría y parecían dejar aparcada la opción de ataque.
La opción llegó, a cinco minutos del final, con un gran pase, obra de De Jong, que aprovechó Raphinha, con una vaselina de cabeza, para culminar la remontada culé y amarrar el liderato antes del parón por el Mundial.