El feo gesto de un judoca japonés a Fran Garrigós y que evidencia su mal perder
Ryuju Nagayama le negó la mano al español tras caer en cuartos de final y despedirse de la lucha por las medallas
Francisco Garrigós y Laura Martínez pelearán esta tarde por las primeras medallas para España
Fran Garrigós, campeón del mundo en Doha (2023), se clasificó este sábado a las semifinales de los Juegos Olímpicos al ganar por ippon al japonés Ryuju Nagayama (6º) y peleará por las medallas en las semis ante el kazajo Yeldos Smetov. Hasta aquí todo bien, una alegría para España y el judo español, pero que no ha encajado nada bien el nipón hasta el punto de negarle la mano a su rival tras el combate.
El judoca español de 29 años, vigente campeón de Europa y del mundo de la categoría, y que había derrotado en octavos al belga Jorre Verstraetten, se impuso con un ippon al japonés, que no quedó conforme con la decisión arbitral y tras protestar a los colegiados y no encontrar consuelo, lo pagó con su rival y no reconoció su victoria.
Este gesto de negarle la mano es realmente feo en el mundo del deporte y más en unos Juegos Olímpicos, donde el espíritu de deportividad y el respeto al oponente son dos pilares fundamentales. Además, disciplinas como el judo, que también es un arte marcial, inculcan desde nada más empezar a practicarse el respeto al contrincante, la disciplina y la buena educación.
Más allá de esta anécdota, lo verdaderamente importante es que el mostoleño está en las semifinales y esta tarde peleará por las medallas junto con la española Laura Martínez. La competición se reanudará a las 16:00 y mientras que nuestra participante femenina competirá en tercer turno, Garrigós lo hará en el octavo. Acto seguido irán las finales o la lucha por el bronce.