Esta es la lesión por la que Rafa Nadal se pierde Roland Garros y por la que no volverá a jugar en 2023

Ha hecho todo lo posible por estar, pero finalmente Rafa Nadal se ha visto obligado a renunciar a Roland Garros y a todo lo que queda de temporada. El tenista balear se ha encontrado con numerosos obstáculos en su recuperación de la lesión que sufrió en el pasado Open de Australia y que en un principio solamente le iba a tener apartado entre seis y ocho semanas.

Es más, el balear confesó que esperaba no estar parado mucho tiempo ya que necesitaba partidos para mantener la forma y alargar su carrera el máximo tiempo posible. «No tengo intención de seguir jugando por los siguientes meses», ha confirmado Nadal.

Por aquel entonces, Nadal creía que su lesión era en la cadera, pero sin embargo, las molestias las tenía en el psoas ilíaco de su pierna izquierda. Una lesión muscular de la que no termina de recuperarse y para la que ya ha hecho hasta dos tratamientos diferentes, aunque por el momento ninguno ha dado el resultado adecuado.

El psoas ilíaco es un músculo que se encuentra en la cavidad abdominal y en la parte anterior del muslo y es uno de los más más potentes del cuerpo ya que comunica la columna vertebral con la pierna. Esto provoca que no se pueda forzar lo más mínimo, pues una recaída podría ser el fin de la carrera del balear, que a lo largo de su carrera ha tenido que lidiar con más de 15 lesiones diferentes.

Su renuncia a Roland Garros deja claro que Nadal piensa en seguir alargando su carrera, pero que quiere hacerlo sabiendo que tiene las garantías de que no se va a lesionar en el corto plazo. Su segunda mitad del 2022 fue un calvario y por encima de todo lo que desea es tener más o menos seguro que puede competir sin lesionarse, por eso ha tenido la capacidad de renunciar a su torneo fetiche.