Los escándalos de Zverev, el rival de Alcaraz en el Open de Australia y del que renegó hasta Federer

Forma parte de la llamada NextGen, es uno de los mejores tenistas del mundo –así lo dice su ranking– y en la actualidad ocupa el puesto número seis de la ATP. Para muchos, es un referente, pero si en un deporte como el tenis quieres ser reconocido positivamente, lo ideal es ser un ejemplo y ser un tipo correcto tanto dentro como fuera de la pista.

Y en este caso, Alexander Zverev (Hamburgo, 1996), próximo rival de Carlos Alcaraz en cuartos del Open de Australia, podría no ser el mejor espejo en el que mirarse. El alemán tiene un talento innato para jugar al tenis. Eso es innegable. Pero desde que se dio a conocer, su carrera ha estado marcada por varios problemas extradeportivos que le han colocado en el centro de las críticas y que le han hecho perder crédito en el circuito ATP.

Zverev es tenista profesional desde 2013 y en sus primeros años destacó notablemente. Potencia, altura y agilidad. Estas tres cualidades le ayudaron a convertirse en uno de los mejores del mundo, algo realmente complicado de conseguir, teniendo en cuenta que fue coetáneo en el tiempo con los tres mejores tenistas de la historia: Rafa Nadal, Roger Federer y Novak Djokovic.

Sin embargo, con el paso de las temporadas, el efecto Zverev se fue desinflando, también machacado por lesiones graves, esas de las que intenta ahora salir en este Open de Australia. El alemán ha sido más 'conocido' por sus casos de violencia doméstica, algo que le está lastrando en su carrera deportiva. El primero estalló en 2020 y el segundo en 2023.

Primera denuncia

Noviembre de 2020. La prensa teutona sacó a la luz el primero de los casos de violencia doméstica. En esa fecha, Olga Sharipova, su expareja, denunció a Alexander Zverev al alegar que el tenista alemán había sido violenta con ella a finales de 2019, coincidiendo con la celebración del Masters 1.000 de Shanghái de dicho año.

Zverev negó en todo momento las acusaciones. Ambos protagonistas fueron entrevistados por una agencia de investigación independiente y, después de haber consultado el informe, la ATP consideró que no había indicios suficientes. Por lo tanto, Zverev no infringió ninguna regla y quedó libre de cargos.

Otra denuncia

Con el paso de las temporadas, la normalidad regresó a la vida de Alexander Zverev, a pesar de pasarse gran parte del 2022 lesionado (cayó así en las semifinales de Roland Garros 2022 contra Rafa Nadal). Pero a finales del pasado mes de octubre de 2023, el alemán volvió a ser noticia por haber reincidido en otro caso de violencia de género. En este caso, 'Sascha' –su apodo en el circuito– fue denunciado por Brenda Patea, otra de sus exparejas y la madre de su único hijo.

Los motivos volvían a ser los mismos. Pero en este caso, la Fiscalía de Berlín vio sospechas suficientes para acusarle e imponerle una multa de unos 450.000 euros por «maltratar físicamente a una mujer y haberle dañado en el marco de una disputa en mayo de 2020 en Berlín».

Para llegar a una resolución final, todavía se tiene que escuchar a las dos partes. Zverev niega, nuevamente, los hechos y ambos van a tener que pasar por el juzgado para declarar. «El servicio competente del tribunal de primera instancia de Tiergarten va primero a volver a escuchar a las partes (…) y luego fijaría una fecha para el proceso», explicó el tribunal berlinés.

Federer y su agencia le echaron

Cuando salió a la luz la primera acusación de violencia doméstica, Zverev formaba parte de la agencia de representación Team 8, que fue fundada en el año 2013 por Roger Federer y Tony Godsick, el manager del suizo.

Dicha acusación propició la desvinculación de Alexander Zverev de Team 8. Federer fue preguntado por esta cuestión en 2021 y el suizo comentó lo siguiente: «Tengo una relación bastante cercana con Team 8 y con Tony Godsick, pero al mismo tiempo estas son decisiones que toma el propio Tony o el equipo. Sascha es un gran tipo. Cuando las cosas le van bien me alegro bastante por él. No me meto en este tipo de decisiones, si te soy sincero».

«Lo que he oído es que Sascha quería empezar de cero, creo que también Tony y la agencia quería eso. Me alegro cuando a Sascha le va bien, y sobre todo lo de las acusaciones, eso es una cosa superprivada de la que no quiero hablar», prosiguió, con su particular elegancia, el suizo.