La deuda del Estado se ha incrementado en 71.485 millones en un año
Por primera vez en la historia, en un solo mes hemos superado los 40.000 millones de euros de recaudación
El Banco de España nos acaba de anunciar que la deuda, de acuerdo con el Protocolo del Déficit Excesivo, ha llegado hasta 1,558 billones de euros que implica, comparado con julio de 2022, un incremento del 4,8 %.
Este incremento supone quedarse a 10.500 millones de la cifra histórica de deuda, que se alcanzó en junio de este año, pero que al compararla con la deuda que teníamos en el mes de julio de 2022, nos lleva a una subida de 71.485 millones en el último año.
Hay que recordar que julio ha sido un mes extraordinario en recaudación de impuestos. Por primera vez en la historia, en un solo mes hemos superado los 40.000 millones de euros de recaudación y, en acumulado, hemos llegado a los 151.000 millones.
Los meses de agosto y septiembre van a volver a ser normales en recaudación y, aunque el año pasado se batieron cifras de recaudación en esos meses, la deuda consolidada del Estado español creció en agosto en casi 5.000 millones y en septiembre en más de 12.000 millones, lo cual significó cerrar septiembre del año pasado con 1,504 billones.
Si esto mismo se repitiese este año, la deuda bajo el Protocolo de Déficit Excesivo (PDE) se iría hasta los 1,575 billones, que sería la que habría que reportar como deuda a Bruselas en el segundo informe anual de la situación del Estado español.
El problema es que en el primer informe enviado en abril, fechado a 31 de marzo, se informó que la deuda a 31 de diciembre llegaría a 1,577 billones de euros.
Con un diciembre de pagas extras, las cosas no pintan bien para el gobierno en funciones
Esto significa que a falta de 3 meses y con un diciembre de pagas extras de empleados públicos y pensionistas, que provocaron en junio una necesidad de endeudarse en 27.000 millones más que en mayo, las cosas no pintan nada bien para el gobierno en funciones.
Un gobierno, que está quemando sus naves en Bruselas, con las estupideces propias de un equipo completamente desnortado, que va como pollo sin cabeza, que pide tonterías y que en menos de una jornada se desdice a sí mismo de lo que pide y pide menos para que se le dé algo, como con lo del catalán.
Además, con un presidente en funciones que se jacta que va a gobernar a costa de lo que sea y lo que puede es pasarle una factura europea que le deje tiritando.
Cada vez tengo más interés en ver la cara de los miembros de la Comisión Europea, cuando vean que la deuda se ha ido de control y, por ende, cuando se publique el déficit, que cantará por todos los costados y más fuerte que Pavarotti en el Libiamo de la Traviata.
Pero veamos donde nos ha dejado julio, que esa es la realidad que ha publicado el Banco de España, última organización pendiente de asalto por las huestes socialistas, que desean tomar el control a costa de lo que sea.
En el siguiente cuadro, que es un resumen de los que publica el Banco de España, podemos ver que en julio del 2022 cerramos con una deuda consolidada PDE de 1,487 billones de euros, de los cuales 1,307 eran de la Administración Central, las Comunidades Autónomas tenían una deuda de 0,314 billones, la Seguridad Social 0,099 billones y los Organismos Autónomos y las Corporaciones Locales con mucha menos deuda. Y con 0,304 billones de deuda cruzada entre Administraciones.
Un año después la deuda neta ha subido en 71.485 millones, lo que equivale a un endeudamiento neto mensual de más de 5.950 millones al mes, de media, en el último año.
Aunque si lo miramos en lo que va de año, la deuda ha subido en 56.000 millones de euros y, por lo tanto, estaríamos en un incremento mensual medio de 8.000 millones.
Y hay que tener claro quiénes son los responsables de este incremento tan importante de la deuda y si miramos los números no podemos culpar a los Organismos Autónomos que no paran de reducir su deuda mes a mes. Tampoco los responsables son las Corporaciones Locales, que solo han incrementado su deuda en 395 millones.
La Comunidades Autónomas son responsables de 11.500 millones, pero la gran tajada de deuda se la lleva el negociado de Pedro Sánchez que en junio había tenido que dedicar 26.000 millones a tapar el agujero de la Seguridad Social, pero que el resto es pura y dura incapacidad de gestión de un gobierno que no le preocupa nada, excepto mantenerse en el poder a costa de lo que sea.
Y lo que sea, no es otra cosa que gastar y gastar y seguir gastando, a pesar del incremento de la recaudación de casi el 4% de los impuestos y del incremento de la recaudación en cotizaciones sociales de casi el 10%, sigue estando desbocado en gastos y ha necesitado pedir 82.764 millones de nuevas deudas, aunque parte de ellas estén cruzadas con otras administraciones.
La situación que estamos viviendo, desde las elecciones de mayo, es terrible. Nadie se encarga de lo importante, que es la economía, solo es importante la política, primero la campaña electoral y ahora la campaña para volver a ser presidente que va a durar hasta casi finales de noviembre y mientras tanto nadie dirige está máquina de gastar, que para poder pagar necesita endeudarse casi todos los meses.