Bruselas rebaja las expectativas del Gobierno y considera que España crecerá un 1,7 % en 2024

La Comisión Europea se muestra más cauta que el Gobierno a la hora de calcular el crecimiento que tendrá España en 2024. Bruselas mantiene las previsiones que publicó en otoño y considera que España crecerá este año un 1,7 %, tres décimas por debajo de lo que consideraba el Gobierno. Son datos, no obstante, positivos ya que se espera que el conjunto de la UE crezca un 0,9 %.

Según los datos publicados este jueves por el Ejecutivo comunitario, España creció un 2,5 % en todo 2023, una décima más de lo que calculó en otoño. Se ralentizará el crecimiento a lo largo del año que ya ha entrado y cifra el PIB español en un 1,7 %, confiando en que se recupere un poco más para 2025 y alcance el 2 %.

Estas cifras son calcadas a las que presentó Bruselas en el mes de noviembre, cuando presentó sus últimas cifras. En aquella ocasión, fijó el crecimiento de la UE en un 0,6 % para 2023 cuando se ha cerrado finalmente en un 0,5 % y calculó que 2024 presentaría un PIB comunitario del 1,3 %, una cifra que ahora rebaja considerablemente hasta el 0,9 %. Mayor confianza tiene la Comisión Europea en lo que ocurra en 2025, ya que espera que el conjunto de los 27 crezca un 1,7 %, idéntica cifra que en noviembre.

La cifra tan baja del conjunto de la UE se ve lastrada por el comportamiento de Alemania, que acabó 2023 en recesión, con un -0,3 % de crecimiento y no se terminará de recuperar este año, presentando un PIB casi nulo. Un 0,3 % sitúa a Alemania casi en el escalón más bajo de Europa –solo la empeora Suecia con un 0,2 %– y condena al resto de los países de su entorno. En Bruselas confían, eso sí, en que Berlín se recuperará algo más para 2025 y pueda alcanzar un 1,2 %, aunque seguirá en el vagón de cola y sin crecer al ritmo de sus socios.

Control de los precios

En cuanto a la inflación, Bruselas considera que España seguirá manteniendo controlados los precios aunque no al nivel del resto de los países. Mientras el conjunto de la UE tendrá una inflación del 3 %, España sufrirá un 3,2 %.

Si la Comisión Europea situaba en 2023 a España como el tercer mejor país de la UE en cuanto a inflación se refiere, las nuevas previsiones para el año que ha entrado son poco halagüeñas para el Gobierno. En otoño, Bruselas pensaba que España estaría una décima por debajo de la media pero ahora la cifra dos por encima, marcando ese 3,2 % frente al 3 % del conjunto de los 27.

La Comisión Europea culpa de este nuevo aumento de los precios a la previsible eliminación de las ayudas gubernamentales que se han aplicado para paliar el impacto de los altos precios y que ejercía una presión sobre la inflación.

Son más positivos en Bruselas con respecto a lo que ocurra en España en 2025, ya que consideran que la UE asumirá una inflación del 2,5 % frente al 2,1 % español.