Hacienda pagó a las comunidades lo que les debía y estas bajaron su déficit un 91 %
En julio para apaciguar los acuerdos con Cataluña, han liberado casi 11.000 millones más de lo habitual que a las comunidades les han servido para aflorar algunos gastos que tenían pendientes, ponerse al día en sus cuentas y presentar un déficit muy razonable
Por fin las comunidades recibieron el dinero pendiente de liquidar por el Ministerio de Hacienda que las tenía acogotadas y en julio les pagó lo que les debía además de ajustar los ingresos de 2022, que obviamente se podrían haber hecho antes, pero a Hacienda no le convenía meter esos gastos para no presentar un mal resultado de déficit a Bruselas en el primer semestre
La culpa, como ya he contado en otros artículos, se la han adjudicado a las comunidades y a los ayuntamientos o por lo menos eso es lo que ha explicado Hacienda en su informe de cierres del segundo trimestre y del acumulado al primer semestre.
Pero con los datos publicados por la IGAE, hoy voy a poder mostrar que durante los seis primeros meses las comunidades han estado recibiendo mucho menos dinero de lo que debían y por ello han ido acumulando déficit, que a cierre de junio era muy preocupante, porque había llegado a los casi 16.000 millones.
Para que se hagan una idea, en los 6 primeros meses, el conjunto de las comunidades había recibido una media de 17.977 millones, una parte de sus propios ingresos por los impuestos propios y otra parte por las transferencias de Hacienda a cuenta, por los diferentes conceptos, pero en el mes de julio los ingresos se han más que doblado y aunque los gastos medios contabilizados eran de 20.637 millones, en julio se han disparado hasta superar los 25.000 millones en un solo mes, el efecto neto del mes ha sido que han tenido en el mes un superávit de 14.541 millones.
La respuesta a porque se hacen así de mal las cosas por parte de Hacienda, estoy convencido de que nunca nos lo dirá la ministra, porque tendría que reconocer que igual que juega con la Contabilidad Nacional y hace con ella lo que quiere, lo mismo hace con las comunidades.
Pero en julio para apaciguar los acuerdos con Cataluña, han liberado casi 11.000 millones más de lo habitual que a las comunidades les han servido para aflorar algunos gastos que tenían pendientes, ponerse al día en sus cuentas y presentar un déficit muy razonable.
Lo malo es que a partir de ahora volverán a estar atosigados y contra la pared y veremos que a final de año, las cifras de déficit volverán a dispararse.
¿Hasta dónde? Hasta donde Hacienda quiera y le interese en sus cuentas consolidadas y como quiera presentarlas a Bruselas.
Hay una cosa que si sabemos por parte del Tesoro Público y es que a cierre de septiembre la deuda de la Administración General del Estado ha superado en 14.800 millones, todo el plan del 2024 y, por lo tanto, el último trimestre va a ser de no pagar nada o menos para tener que pedir lo mínimo prestado, porque la situación puede ser muy complicada con Bruselas, a la que hay que mandar esta semana el plan para los próximos 4 años de déficit y de deuda y evidentemente los resultados de deuda a septiembre le complican y mucho la vida a Hacienda, que le complicará mucho la vida a las Comunidades Autónomas.
Así que ya saben el refrán español, que dice que la alegría en casa del pobre dura muy poco, por lo tanto, a disfrutar que en julio han salido unos datos no vistos desde hace muchos trimestres. Y no se olviden que en cualquier caso esto es el sueño de una noche de verano.
Cómo pueden ver, los ingresos conjuntos de todas las comunidades en un solo mes han crecido un 36,7% equivalentes a sumar 39.634 millones más de ingresos en un solo mes, que provienen de la liquidación de los Impuestos del 2022 y de la actualización de las Transferencias corrientes, que son las dos partidas que más crecen en los ingresos.
Los gastos también suben un 20,3 % que equivalen, como he comentado, a gastar 25.093 millones más en un solo mes, pero está claro que se debe a que había gasto pendientes de reconocer y que se han contabilizado en el mes de julio con la alegría de los ingresos.
Como ya he dicho, no creo que vuelva a haber muchas alegrías para las comunidades, entre otros motivos porque la caja está con telarañas, lo de septiembre en deuda ha sido un sorpresón y Hacienda va a tener que hacer filigranas si no quiere presentar un déficit que llama tanto la atención como el que va a presentar Francia, que va a ser a corto plazo el gran problema para la Unión Europea en los próximos trimestres.
Así que preparémonos a ver grandes maquillajes de cifras, retenciones de pago a todo lo que no sea estratégico aunque se haya comprometido y no se olviden que si el año pasado en diciembre se debían oficialmente casi 60.000 millones, este año esa cifra va a ser ridícula comparada con la realidad.
Así que desde aquí un consejo a todas las comunidades sería que en lo que les queda de año que se abrochen el cinturón o si no van a volver a pasarlas canutas.