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El presidente de Correos, Pedro Saura.

El presidente de Correos, Pedro Saura.Eduardo Parra / Europa Press

Reunión cumbre hoy para los empleados de Correos: empieza a abordarse el plan de salidas de la compañía

Los sindicatos han sido citados hoy por Correos a la segunda reunión negociadora sobre el futuro de la plantilla. En principio debería esperarse que comience a abordarse el plan de salidas y que se utilice la reunión para empezar a hablar del modo en que se reestructura la compañía, algo crucial para su futuro. Como ya hemos comentado en otros artículos, la empresa tiene actualmente unos costes de personal que la hacen inviable: 1.600 millones de euros anuales, más o menos la cantidad que factura en su negocio postal y de paquetería.

Por este motivo, la compañía se halla en plena reorganización, y parte importante consiste en reducir esos costes de personal al 70 % de los ingresos.

La idea era que el acuerdo entre la empresa y los sindicatos se materializase antes del 15 de marzo, pero ya parece poco probable que se consiga: la reunión para abordar la cuestión es hoy, 11 de marzo, teóricamente a solo cuatro días del plazo.

Los sindicatos que representan a la mayoría de los trabajadores (todos menos CCOO, que es el mayoritario pero solo llega al 38 % de la representación) ya han dejado claro que no van a aceptar cualquier cosa: «Vamos a esperar las propuestas que presenta Correos y comprobar si se acercan a nuestras exigencias, que están absolutamente claras. Si no se acercan, no habrá acuerdo», apuntan desde CSIF.

En la reunión del 20 de febrero, la empresa expuso los puntos prioritarios para empezar a negociar con los sindicatos: concreción del plan de salidas voluntarias y excedencias voluntarias incentivadas; reestructuración de plantilla para desagrupar los centros nodales -instalaciones donde se reciben, clasifican y distribuyen envíos-; mecanismos para incentivar la voluntariedad para el turno de tarde; actualización acordada de la materia de permisos.

La falta de información ha sido hasta ahora el principal problema para poder abordar el plan de reestructuración de personal: «Estamos en el punto de partida de una negociación compleja y trascendental para Correos, y salvo un sindicato que presume de reuniones bilaterales con profusión de documentación -CCOO-, el resto de miembros de la comisión negociadora carecemos de todo tipo de información y documentación», apuntan desde UGT.

Para este sindicato, el segundo de Correos en términos de representación, hay dos prioridades: el plan de salidas y excedencias voluntarias incentivadas y la desagrupación de los centros nodales. Sobre la primera exigen «de inmediato» información detallada y suficiente, una propuesta de la empresa motivada y razonada y tiempo para analizarla y presentar una contrapropuesta con las mejoras que consideran imprescindibles que se recojan para poder llegar a un acuerdo.

En cuanto a los centros nodales, UGT se opuso a su creación desde el principio: «Advertimos de que serían ruinosos, como reconoce ahora la empresa. Hemos denunciado permanentemente las vulneraciones en condiciones laborales y prevención de riesgos laborales. Trabajaremos para que se revierta cuanto antes y que se haga en condiciones laborales justas para todos los trabajadores».

Los sindicatos UGT, CSIF y Sindicato Libre están viendo en el presidente de Correos, Pedro Saura, una mayor disponibilidad a escuchar sus sugerencias de las que tiene el director de Recursos Humanos. A partir de hoy empezará a verse cómo evoluciona la negociación y, en consecuencia, el futuro de los 47.000 empleados de Correos.

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