Educación
Datos científicos muestran las secuelas de los niños que estudian en catalán: «Son 'perdedores'»
A través de una exhausto análisis comparativo de los informes PISA del año 2015 y el año 2022 se percibió la existencia de un efecto negativo de la política de inmersión sobre el rendimiento escolar
El empeño de los dirigentes independentistas en imponer el catalán en todos los niveles de la sociedad está pasando factura en educación. Según un estudio reciente, los alumnos que se educan únicamente en catalán sufren un retraso escolar de un curso académico respecto a los estudiantes que reciben su educación en la Comunidad de Madrid, cuya lengua materna se corresponde con la utilizada en la escuela.
Según el recién publicado informe sobre el Impacto en el rendimiento académico de la inmersión lingüística y el índice socioeconómico y cultural, «los modelos de una inmersión lingüística severa marcan diferencias significativas entre territorios en materia de rendimiento».
Este estudio ha sido publicado en la Revista Española de Pedagogía y consta firmado por el director de la Cátedra de Políticas Educativas de la Universidad Camilo José Cela de Madrid, Francisco López Rupérez, y por los profesores de la entidad Álvaro Moraleda e Isabel García.
A través de una exhausto análisis comparativo de los informes PISA del año 2015 y el año 2022, mediante modelos lineales multinivel, los autores percibieron la existencia de un efecto negativo de la política de inmersión sobre el rendimiento escolar: «Los resultados que hemos expuesto apuntan claramente a la existencia de un problema de equidad, que genera 'perdedores' de la política de inmersión lingüística en Cataluña».
Los autores percibieron la existencia de un efecto negativo de la política de inmersión sobre el rendimiento escolar
Además, el estudio concluye que el plan de los independentistas de fomentar el nacionalismo en las aulas ha funcionado: «Los encuestados que han estado expuestos durante más tiempo a la enseñanza en catalán tienen sentimientos catalanes más fuertes», reza el informe.
La reciente publicación de los datos de PISA 2022, con una caída notoria de las puntuaciones correspondientes a Cataluña en las tres áreas principales de evaluación, ha puesto de nuevo sobre el tapete, tanto en el ámbito social como en el político la dimensión propiamente educativa de la cuestión lingüística.
En lo concerniente al porcentaje de alumnos que hablan en casa un idioma diferente al de la escuela, Cataluña y Baleares, con valores de 55.54 % y 51.80 %, respectivamente, son las comunidades autónomas con valores máximos para esta variable. En cuestión de rendimiento, Cataluña también cae en picado con 31 puntos PISA.
Informe PISA
Según el último informe PISA, los alumnos que estudian en comunidades autónomas con una alta inmersión lingüística, Cataluña y País Vasco, han bajado en sus competencias en matemáticas –con una caída de 21 y 17 puntos, respectivamente–, y en lectura –38 y 31 puntos–, respecto a informes anteriores.
Este documento evidenció que aunque los malos resultados impactaron de lleno en todas las regiones de España, se refleja que el sistema educativo de imposición lingüística convierte al alumnado de estas regiones en 'perdedores' respecto a los estudiantes de otras comunidades autónomas.
Este informe, el octavo en el que participó España y el primero que reflejó el impacto de la covid-19 en la educación, se centró en la competencia matemática como principal, y en las lectoras y científicas como secundarias, para analizar el nivel de los estudiantes de 4º curso de la ESO (15-16 años), con una muestra de 30.800 estudiantes en 966 centros educativos.