Ruptura en la Generalitat: los militantes de Junts votan a favor de salir del Govern

Junts se va del Govern. Así lo ha decidido la militancia, que con un 55,73% de los votos, ha optado porque la formación rompa con ERC y salga del ejecutivo que preside Pere Aragonès. Un 42,39% quería que se mantuviera la coalición, y casi un 2% de los votos ha sido en blanco. Recordemos que la pregunta de la consulta era «¿Quieres que Junts siga formando parte del actual Govern de la Generalitat de Catalunya?».

Está por ver cómo se va a producir esa ruptura, si va a tener un efecto inmediato. Es decir, si los consejeros de Junts se van a ir en bloque y cuándo, lo que obligará al presidente de la Generalitat a hacer una remodelación a fondo, la mitad del ejecutivo. Y es que estamos hablando de sustituir a seis consejeros: Jaume Giró (Economía y Hacienda), Victoria Alsina (Acción Exterior), Gemma Geis (Universidades), Josep Maria Argimon (Salud), Violant Cervera (Derechos Sociales) y Lourdes Ciuró (Justicia). Y a ello hay que añadir la vacante en Vicepresidencia, que ocupaba el cesado Jordi Puigneró. Aragonès se ha reunido con su equipo tras conocerse la decisión e Junts.

Lo que sí está claro es la intención de ERC de gobernar en solitario e intentar agotar la legislatura, aunque para ello deberá buscar a acuerdos con otras formaciones, como los comunes y el PSC, que, en cualquier caso, han mostrado su predisposición anteriormente a ser «parte de la solución, y no del problema». Y una prueba de fuego puede estar en la negociación de los próximos presupuestos de la Generalitat.

De esta manera, sería el primer Govern en solitario en Catalunya desde el de Convergència Democràtica (CDC) encabezado por Artur Mas en 2015 cuando salió Unió del Ejecutivo. Y también será el que tendrá menos apoyos parlamentarios de la historia del Parlament, ya que los republicanos tienen 33 diputados en la Cámara catalana, los mismos que el PSC, aunque los socialistas han dejado claro que darían su apoyo desde fuera del ejecutivo.

Impacto de la remodelación

Está por ver cómo se producirá y cómo se concretará la remodelación, pero también las consecuencias que pueda tener en el seno de Junts per Catalunya. Es decir, que la ruptura del Govern no suponga también una ruptura interna, porque en esta última semana se han podido ver las dos almas de la formación. De hecho, el secretario general de Junts, Jodi Turull, ya evitó pronunciarse sobre qué iba a votar después de que la sindicatura electoral pidiera que los cargos orgánicos del partido se abstuvieran de hacer pública su decisión. La derrotada, evidentemente, ha sido la opción más pragmática de Junts, que apostaba por mantenerse en el ejecutivo y la ganadora ha sido la más radical, representada pro la presidenta de la formación Laura Borràs y Carles Puigdemont.

En el primer grupo se encontraban la mayoría de miembros del Govern. Algunos de ellos se habían pronunciado de forma muy clara, como el consejero de Economía, Jaume Giró, que llegó a asegurar que, si Junts salía del ejecutivo, será «imposible» conseguir la independencia. Y también se preguntaba qué partido no había tenido que «tragarse alguna vez algún sapo». También la consejera Victoria Alsina se afilió a Junts para poder participar en la consulta y votar para mantenerse en el Govern. En este sector está también Xavier Trias, quien consideraba «erróneo y equivocado» salir del ejecutivo. Es más, su candidatura a la alcaldía de Barcelona, que estaba sobre la mesa, dependía de esa cuestión, de la estabilidad en el gobierno catalán. También apostaban por la continuidad exconsejeros como Josep Rull, Damià Calvet o incluso el exsecretario general de Junts, Jordi Sánchez.

El que ha salido reforzado ha sido el sector más duro, que se ha posicionado claramente a favor de salir del Govern. Además de Laura Borràs y de Carles Puigdemont, forman parte de él tres de los cuatro vicepresidentes de Junts , Josep Rius, Francesc de Dalmases y Aurora Madaula; la consellera de Investigación y Universidades, Gemma Geis; el exvicepresidente del Govern Jordi Puigneró; el secretario de Organización, David Torrents; el eurodiputado Toni Comín; la alcaldesa de Girona, Marta Madrenas, y los diputados Jaume Alonso-Cuevillas y Joan Canadell.