Desde febrero, se realizan controles preventivos que han llevado a identificar a miles de jóvenes y a decomisar cientos de armas blancas
El plan contra las bandas latinas no funciona: cuarto intento en un año de acabar con la violencia
Interior reforzará todos los dispositivos de lucha contra la violencia entre las bandas latinas, los visibles y los invisibles
Al menos seis asesinatos en la Comunidad de Madrid en lo que llevamos de año y una cifra bastante más elevada de heridos es el resultado de los enfrentamientos entre las distintas bandas latinas que operan en la capital de España y en las localidades de alrededor y que, demuestran que el Plan que se estableció hace ahora un año no está funcionando. Por ese motivo, el Ministerio del Interior ha ordenado un refuerzo de especial intensidad de los dispositivos policiales de seguridad, control y seguimiento de las bandas latinas.
En concreto, son cuatro planes independientes pero relacionados con la actividad de las bandas latinas:
Planes coordinados contra las bandas latinas
- Plan de actuación y coordinación policial frente a los grupos violentos de carácter juvenil.
- Plan estratégico de respuesta policial al consumo y tráfico minorista de drogas en zonas, lugares y locales de ocio.
- Plan director para la convivencia y mejora de la seguridad en los centros educativos y su entorno.
- Protocolo de actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado respecto al control de las armas blancas y otros instrumentos peligrosos para la seguridad ciudadana.
Más allá de nombres más o menos rimbombantes, a efectos prácticos, este reforzamiento de los dispositivos policiales se traducirá en:
Efectos prácticos
- Aumento de la presencia preventiva policial con uniforme y de paisano en aquellos lugares donde se hayan detectado actuaciones o comportamientos violentos.
- Incremento de la actividad investigadora por parte de las unidades policiales con un mayor uso de las herramientas de inteligencia policial para detectar los delitos.
- Mayor seguimiento en redes sociales, páginas web y foros de internet que sean activos en la apología de conductas delictivas.
- Incremento de las inspecciones a locales y espectáculos públicos y de la presencia policial a fin de controlar la venta de alcohol a menores o la permisividad al consumo de drogas.
- Aumento de los controles de conducción de vehículos bajo influencia de alcohol o drogas en las zonas o lugares de ocio.
- Difusión de iniciativas de divulgación y concienciación a menores y jóvenes sobre las principales amenazas y de las soluciones de prevención o autoprotección.
- Endurecimiento de los mecanismos de control para impedir la tenencia y el uso de armas blancas y otros instrumentos peligrosos.
- Ocupación temporal de cualesquiera objetos, instrumentos o medios de agresión, incluso de las armas que se porten con licencia, permiso o autorización cuando exista peligro para la seguridad de las personas.
Estas medidas se compartirán, además, tanto con las policías autonómicas como con las locales y los responsables de los servicios de seguridad privada.
Cuarto intento
Este es el cuarto intento del Ministerio del Interior por tratar de cortar el incremento de la actuación violenta de las bandas latinas en la Comunidad de Madrid, donde se concentra el mayor número de incidentes de este tipo. En concreto, la Policía apunta que existen unos 400 pandilleros.
El plan, con carácter preventivo, se estableció en diciembre de 2021. La Policía había detectado un incremento de los actos violentos y de las propias bandas latinas, que ya no solo incluía a jóvenes de origen latino.
El asesinato la noche del 25 de febrero de dos jóvenes hizo que la Delegación del Gobierno en Madrid rediseñara el plan en la Comunidad: se identificó a miles de jóvenes, se detuvo a cientos de ellos y se incautaron cientos de armas.
Pero la violencia, lejos de aminorar, creció. Solo en lo que llevamos de año, se han registrado al menos seis asesinatos por la lucha entre bandas latinas.
A raíz del asesinato el 27 de abril de un joven de 18 años en Villaverde, el pasado mes de mayo, el Ministerio del Interior optó por reforzar el plan. Las bandas latinas dejaron de llamarse latinas y se incrementó la vigilancia de las zonas donde estas bandas pelean entre ellas por hacerse con el control.
El asesinato los pasados 2 y 3 de octubre de otros dos jóvenes en Fuenlabrada y en Alcorcón hizo repensar nuevamente el plan al Ministerio del Interior, y ayer se presentó el nuevo plan.
