No es todavía directora de la Guardia Civil y ya lleva la trenca que les niegan a los agentes
Mercedes González se despidió de su cargo de delegada del Gobierno con una trenca de la Guardia Civil que los agentes denuncian que a ellos se les deniegan
No tiene un buen inicio de cargo la que este martes será nombrada directora general de la Guardia Civil, Mercedes González. O no se ha despedido de la mejor manera de su puesto anterior al frente de la Delegación del Gobierno en Madrid, según se mire.
Mercedes González acudió este lunes a la presentación de los 76 agentes de la Agrupación de Tráfico que se incorporan en la Comunidad de Madrid. Y, quizá como guiño al cargo que ocupará a partir de este martes, una vez que el Consejo de Ministros apruebe su nombramiento como nueva directora general de la Guardia Civil, portó una trenca de la Benemérita.
Podría ser un gesto de complicidad con el cuerpo si no fuera porque las asociaciones de guardias civiles llevan meses denunciando la situación de precariedad que tienen con la ropa que les da el Ministerio del Interior.
Esta situación se produce, además, en pleno escándalo del llamado ‘caso grapa’, una investigación de 2020 que se ha reactivado este mes de marzo en la que se investiga los contratos relacionados con los uniformes de la Guardia Civil.
Caso grapa
AUGC denunció al destaparse la presunta trama que «mientras que guardias civiles prestaban servicio en plena pandemia sin medios de autoprotección en contagios, según informaciones periodísticas sobre la investigación, altos mandos podrían favorecer a empresas o planearon hacerlo en relación al suministro».
El gesto de la próxima directora general de la Guardia Civil tampoco ha pasado desapercibido para el Partido Popular. Así su portavoz en la comisión de Interior, Ana Vázquez, ha denunciado en redes sociales que «los guardias civiles llevan esperando más de dos años para una trenca para trabajar».
Mercedes González, hasta ahora delegada del Gobierno en Madrid, pasará a ocupar el cargo de directora general de la Guardia Civil después de que la anterior directora, María Gámez, dimitiera el pasado miércoles al conocer, según la versión oficial, que su marido había sido llamado a declarar como investigado en un caso de corrupción.