El Gobierno quiere sancionar a Falange Española con 10.000 euros por homenajear a Primo de Rivera

El Ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática ha propuesto sancionar a Falange Española (FE) con 10.001 euros –con una reducción del 20 % si se reconoce la responsabilidad– por una «infracción muy grave» de la Ley de Memoria Democrática, según la documentación a la que ha tenido acceso El Debate.

El Departamento que lidera Félix Bolaños considera que esta organización política ha llevado a cabo «actos públicos contrarios a la Memoria Democrática». En concreto, se refiere a la última Marcha de la Corona, celebrada, como cada año, la noche del 19 al 20 de noviembre desde el centro de Madrid hasta el Valle de los Caídos, para conmemorar la muerte del fundador de FE, José Antonio Primo de Rivera.

Según consta en la «Propuesta de resolución del expediente administrativo sancionador por actos públicos contrarios a la memoria democrática», enviada al secretario de Estado de Memoria Democrática, Fernando Martínez López, y que obra en poder de este diario, el Ministerio de Bolaños apunta a que durante ese homenaje se llevaron a cabo conductas constitutivas de infracción muy grave, según el artículo 62.1, epígrafe e, de la citada ley.

Este tipifica como infracciones muy graves «las convocatorias de actos, campañas de divulgación o publicidad que por cualquier medio de comunicación pública, en forma escrita o verbal, en sus elementos sonoros o en sus imágenes, inciten a la exaltación personal o colectiva, de la sublevación militar, de la Guerra o de la Dictadura, de sus dirigentes, participantes en el sistema represivo o de las organizaciones que sustentaron al régimen dictatorial, cuando entrañe descrédito, menosprecio o humillación de las víctimas o de sus familiares».

Asimismo, Presidencia argumenta su propuesta de sanción a Falange Española en el texto del artículo 61 de esa misma ley, que señala que «serán responsables como autores las personas físicas o jurídicas que dolosa o negligentemente realicen las acciones u omisiones constitutivas de infracción conforme a lo previsto en el artículo siguiente».

El Ejecutivo ha adjuntado a la propuesta de resolución sancionadora un informe elaborado por Miguel Ángel del Arco Blanco, profesor de la Universidad de Granada. En el mismo se refiere al acto como «de exaltación del franquismo» y apunta a que se realizó en varias ocasiones «el saludo fascista». También indica que «estas concentraciones y movilizaciones conmemorativas suponen agravio, menosprecio y humillación para las víctimas o los familiares de los republicanos asesinados o perseguidos durante la guerra y el franquismo».

«Así –continúa el texto–, consideramos que los actos del 20 de noviembre de 2022 contravienen los tres objetivos marcados por la Ley de Memoria Democrática, a saber: 1) la recuperación, salvaguarda y difusión de la memoria democrática; 2) el reconocimiento de quienes padecieron persecución o violencia; 3) el repudio y condena del golpe de Estado del 18 de julio de 1936».

El abogado de Falange Española, Santiago Milans del Bosch, explica que la propuesta de resolución de sanción, que califica de «totalmente esperpéntica y sectaria», fue notificada el pasado 31 de mayo y que, desde entonces, disponen de diez días para presentar alegaciones.

Asimismo, añade que «la secretaría de estado de Memoria Democrática pide un informe no a la Academia de la Historia, sino a un profesor de Granada, que es el jefe de su hija». Alba Martínez, hija del secretario de Estado de Memoria Democrática, es doctora en estudios de las mujeres por la Universidad de Granada, según publicó Okdiario.

«Una víctima de la guerra»

Falange Española ha encargado al historiador Luis Eugenio Togores un contrainforme al documento encargado por el Gobierno de Pedro Sánchez con el objetivo de desmontar las acusaciones en las que se articula la propuesta de sanción.

Togores, que se refiere a Del Arco como uno de los historiadores que «está en todos los grupos memorialistas, en el negocio de la memoria», señala que Falange Española es «un partido legal y, como cualquier partido, tiene derecho a celebrar los actos que considere». Togores apunta a que la Marcha de la Corona se lleva celebrando desde la época franquista y «luego con todos los gobiernos» de la democracia.

«No es un acto para atacar a las víctimas de la guerra», añade. Primo de Rivera es, además, según el docente del CEU, «una víctima de la guerra» y recuerda que el político fascista fue apresado en marzo y fusilado en noviembre de 1936 cuando estaba encarcelado en Alicante, por lo que no pudo participar en el enfrentamiento bélico fratricida.

Respecto a que durante el homenaje a Primo de Rivera se entonase el Cara al Sol, Togores indica que este es uno más de los himnos que se cantaron durante la Guerra Civil y que la letra no tiene un contenido de humillación. «Es como si los comunistas cantan La Internacional», zanja.

Ahora habrá que esperar a ver si se consuma la sanción que, recuerda el documento de Presidencia, es la de una cuantía más baja dentro de las infracciones muy graves, al tener la Marcha de la Corona un «carácter puntual». El acto de este año es el primero que se produce tras la entrada en vigor de la Ley de Memoria Democrática, el pasado 19 de octubre, y el expediente sancionador se abrió en noviembre, días después de la Marcha de la Corona, y en él se recogen informes de la Brigada Provincial de Información de la Policía Nacional y de la Guardia Civil.