Sumar, Bildu y BNG: los socios de Sánchez que arremeten contra Israel y apoyan a Palestina
El atentado terrorista de Hamás contra Israel ha generado una ruptura en el Gobierno español, que se ha expandido hasta sus socios parlamentarios de izquierdas. Pedro Sánchez –al igual que han hecho los ministros socialistas de su Ejecutivo– indicó el propio sábado 7 de octubre en sus redes sociales que «seguimos con consternación el ataque terrorista contra Israel y nos solidarizamos con las víctimas y sus familiares». «Condenamos rotundamente el terrorismo y exigimos el cese inmediato de la violencia indiscriminada contra la población civil», agregó el presidente del Gobierno en funciones.
Sin embargo, Sumar –el socio principal de Sánchez– ha evitado tildar de «terrorista» el ataque de Hamás y han optado por reprobar a Israel. Así pues, el pasado lunes 9 de octubre, el portavoz de la formación 'fucsia', Ernest Urtasun, afirmó que el país del primer ministro Benjamín Netanyahu es una «fuerza ocupante» y señaló que realiza «una violación sistemática de derechos».
En una línea similar se manifestó Íñigo Errejón, dirigente de Más País –partido que forma parte de la coalición de Yolanda Díaz– que culpó tanto a Hamás como a Israel de ejecutar «crímenes de guerra», y optó por no calificar a la banda armada palestina de «grupo terrorista». Además, la líder de Podemos, Ione Belarra, publicó en Twitter que «el pueblo palestino lleva décadas sufriendo una gravísima vulneración de los derechos humanos que debe cesar ya», ya que «la paz y el fin del apartheid deben ser apoyados por una comunidad internacional».
Por su parte, el Bloque Nacionalista Gallego (BNG) ha sido una de las formaciones que más ha mostrado su apoyo a Palestina. La cuenta oficial del partido en Twitter expuso el pasado sábado «nuestro apoyo al pueblo palestino» e indicó que Israel realiza una «política de apartheid». De hecho, el lunes 9 los nacionalistas gallegos realizaron una multitudinaria concentración en Santiago de Compostela bajo el lema «paz y libertad para Palestina».
La izquierda abertzale de Bildu también ha dejado clara su postura. Arnaldo Otegi aseguró en una entrevista en Radio Euskadi que «Palestina es un país ocupado» y que mientras «no se alcance un acuerdo justo y duradero estas situaciones seguirán pasando». De hecho, en el Parlamento de Navarra Bildu ha votado en contra de una declaración institucional que condena el ataque realizado por Hamás en Israel.
ERC ha sido el único partido de izquierdas del actual bloque 'Frankenstein', que, aunque de soslayo, ha condenado la situación vivida en Israel. Meritxell Serret, consejera de Exteriores del Ejecutivo catalán, apuntó en sus redes sociales que «estamos junto a los pueblos de Israel y Palestina, de todas las víctimas de este conflicto, y apelamos a redoblar los esfuerzos por garantizar la paz». Serret no mencionó a Hamás, lo que causó que la dirigente de Junts, Victòria Alsina, le recriminara su «equidistancia».
Las críticas de la derecha
Los ataques terroristas de Hamás han causado una gran repercusión en relación con cómo se ha tratado a las mujeres, que han sido asesinadas y violadas. En este contexto, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayusó aseveró que es «una gran oportunidad» para que dirigentes de la izquierda condenen los ataques de Hamás en Israel y «defiendan» a las mujeres. De igual manera, el portavoz de los 'populares', Borja Sémper, recalcó que «los ataques terroristas se están cebando con las mujeres, asesinando, secuestrando y violando».
Así pues, desde el PP indicaron que «la dependencia de Pedro Sánchez de determinadas formaciones» es «preocupante» por «la falta de contundencia». Asimismo, la líder de Vox en la Asamblea de Madrid, Rocío Monasterio, reprendió a la representante de Más Madrid, Mónica García porque «ha justificado las violaciones de mujeres en Israel».