Sánchez se queda solo al defender el «alto el fuego humanitario» pero celebra la conferencia de paz

El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, se quedó solo entre los líderes de los 27 Estados miembros a la hora de defender el «alto el fuego humanitario» entre Israel y Hamás. Sánchez expresó su propuesta antes de reunirse con los líderes de la UE el 26 de octubre.

Lo que se ha aceptado en el documentos de conclusiones es el concepto de «pausa humanitaria» y «corredor humanitario».

El Consejo se congratula por haber adoptado una propuesta que les permitirá avanzar desde este momento a nivel diplomático como un solo bloque. Hasta el momento ha habido hasta cinco posturas mantenidas por diferentes bloques.

En paralelo ha propuesto la celebración de una cumbre internacional de paz en un plazo de seis meses con el objetivo de hallar una solución definitiva, que no es otra cosa que el ya conocido plan de construir dos Estados.

La propuesta ha recibido el respaldo de los demás socios de la Unión Europea en las conclusiones de la cumbre de dos días en Bruselas que inició este jueves.

Sin embargo, los intentos de Madrid por incluir una mención humanitaria al «alto el fuego» en el texto resultante de la primera jornada de la cumbre no tuvieron éxito.

Sánchez subrayó que el enfoque debe centrarse en el reconocimiento de Palestina como un Estado, ya que «Israel ya cuenta con el reconocimiento de la comunidad internacional».

A pesar de que la propuesta de la conferencia se encuentra en sus primeras etapas, las primeras reacciones de fuentes diplomáticas indican que no existe una oposición significativa por parte de la comunidad internacional.

Acordar este punto en común ha llevado más de seis horas. El plan inicial era llegar a la cena para tratar los temas internacionales, pero será después de la misma cuando se hable de los temas económicos. Entre otros, la vital revisión del marco financiero plurianual.

Las declaraciones de Sánchez se producen después de la Cumbre de Paz de El Cairo del pasado fin de semana sobre la situación en Oriente Medio, donde no se pudo llegar a un acuerdo sobre un posible avance en la guerra entre Israel y Hamás.

Fuentes de la delegación es por lo que consideran este texto como un «éxito» si se tienen en cuenta las posturas iniciales y las actuales. «Estamos liderando porque pedimos más», aseguran desde la parte española.

Liderar es pedir la conferencia de paz al mismo tiempo que quedarse solo defendiendo el alto el fuego. Una de cal y otra de arena.

Las mismas fuentes consideran que «Sánchez ha evitado que se nos tache de tener un doble rasero» en política internacional ante la posibilidad de mantener posturas distintas ante conflictos armados, en clara relación con la postura frente a la guerra de Ucrania y la actual en Oriente Próximo.

En esta ocasión, España sí ha defendido posturas diferentes. Ante la agresión a Ucrania pidió que la respuesta fuera contundente. Es más, Madrid es uno de los gobiernos que suministran armamento letal contra Rusia. En cambio, en cuanto a Israel se refiere, no se ha pronunciado con la misma contundencia.