El bloque 'Frankenstein' pide a Sánchez controlar a los jueces y Puente se pliega: «Paciencia, los hechos llegarán»
En la carta a la ciudadanía que Pedro Sánchez publicó el martes 4 de junio en su cuenta de Twitter el presidente del Gobierno afirma que la citación judicial de su mujer, Begoña Gómez –para que declare como investigada por un delito de tráfico de influencias y otro de corrupción– es «un zafio montaje impulsado por las asociaciones ultraderechistas demandantes». «Ella es una mujer trabajadora y honesta que reivindica su derecho a trabajar sin renunciar a ello por las responsabilidades de su marido», agregó.
Tras la misiva, la exministra de Podemos y candidata de la formación 'morada' a las europeas, Irene Montero, ha demandado al Ejecutivo que que pase «de las cartas al Boletín Oficial del Estado (BOE) y a las políticas públicas para proteger a la democracia de los sectores reaccionarios que quieren mandar más que el presidente del Gobierno». En cuanto al Poder Judicial, Moreno ha aseverado que «lo que queremos es que podamos renovar con la mayoría plurinacional del Congreso el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), sin el Partido Popular», ya que en la actualidad se necesita una mayoría reforzada para elegir a los miembros de este órgano.
Por su parte, el cabeza de lista de Junts –el partido que lidera el prófugo Carles Puigdemont– a los comicios comunitarios, Toni Comín, ha indicado que el jefe del Ejecutivo ha «descubierto el lawfare ahora con su mujer». Además, en la misma línea que la extitular de Igualdad ha solicitado «menos cartas y más reformas», como la de la «Ley Mordaza» o la del sistema de elección del CGPJ.
El dirigente de Sumar y secretario primero del Congreso, Gerardo Pisarello, ha dictaminado que la citación a Gómez es «es una operación clarísima por parte de algunos jueces en connivencia con lo que plantea Manos Limpias», y ha tachado de «impresentables» las algunas decisiones de algunas magistrados. La líder de su partido, Yolanda Díaz, publicó en la noche del martes un mensaje en Twitter en el que manifestó que el combate ante situaciones de lawfare «no va de cartas», dado que a la «derecha se le para con hechos».
Así las cosas, cuando se le ha preguntado al ministro de Transportes, Óscar Puente, por las palabras de la también titular de Trabajo y Seguridad Social, el miembro socialista del Gobierno ha señalado que «llegarán los hechos. Paciencia, los hechos llegarán. Es evidente que hacen falta cambios, que hacen falta reformas». «Y esas reformas y esos cambios llegarán», ha zanjado Puente.
La estrategia con los medios
En el contexto de las medidas que exigen el Gobierno y sus socios, el progubernamental diario El País ha publicado esta tarde una información titulada «Estrangular la publicidad de las webs que difunden bulos es la mejor vía para acabar con la desinformación». En el cuerpo de la noticia se subraya que «la vía más efectiva para combatir la desinformación es tratar de que las webs que las difunden reciban menos ingresos por publicidad», según un estudio de la revista Nature.
Desde que Sánchez dio a conocer su primera carta a la ciudadanía, él y su gabinete han utilizado diferentes adjetivos para calificar a la prensa que les resulta incómoda, como «pseudomedios» o el más reciente «tabloides digitales». «La denuncia está basada en mentiras y bulos de tabloides digitales», señaló la portavoz del Ejecutivo, Pilar Alegría, acerca de la citación judicial a la mujer del presidente del Gobierno en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros del pasado 4 de junio.