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16 de septiembre de 2024

El presidente del Parlament, Gabriel Le Senne, durante la sesión plenaria del 18 de junio

El presidente del Parlament, Gabriel Le Senne, durante la sesión plenaria del 18 de junioEuropa Press

Gabriel Le Senne ve en la denuncia del Gobierno una «nueva amenaza» para tapar su presunta corrupción

  • El presidente del Parlamento balear pide disculpas por haber roto la foto y descarta dimitir

  • Abascal defiende a Le Senne: «Te están atacando por defender la neutralidad de las instituciones»

tras la denuncia ante la Fiscalía anunciada por el Gobierno de Pedro Sánchez contra el presidente del Parlamento de Baleares, Gabriel Le Senne, por romper una foto de una mujer republicana asesinada en la Guerra Civil, Aurora Picornell, en el pleno del pasado martes, su gabinete ha emitido un comunicado en el que califica como «nueva amenaza» esta denuncia y asegura que «ninguna amenaza ni chantaje» del Gobierno «va a conseguir tapar» la presunta corrupción que cerca al Ejecutivo socialista y a la familia de Sánchez.

«Las exageraciones y relatos incompletos, unidos a la campaña de acoso, insultos y amenazas al presidente del Parlamento de las Islas Baleares, que ha contado con la participación de diputados de esta Cámara, suponen un atentado contra la democracia, la neutralidad e imparcialidad institucional y contra el Estado de Derecho», subraya Le Senne en el comunicado, que ha podido consultar El Debate.

El presidente de la Cámara explica que en la sesión plenaria del 18 de junio las diputadas socialistas Mercedes Garrido y Pilar Costa «exhibieron carteles claramente partidistas» en la Mesa del Parlamento, algo que, apunta en el texto, contradice la neutralidad que se requiere de los miembros de este órgano. Le Senne sostiene que «en privado y de manera reiterada» trató de convencer a Garrido de que retirara los carteles para mantener esa neutralidad, y critica que no lo hizo pese a que había asegurado que lo harían al acabar la intervención de un diputado.

Indica a renglón seguido que «las quejas de numerosos diputados de distintos grupos por la falta de respeto a la Cámara y a la Mesa siguieron en aumento» y ante esto, siguiendo «el deber de neutralidad e imparcialidad» de la Mesa, trasladó «en privado» a la vicepresidenta segunda de la Mesa que si no retiraban voluntariamente los carteles con las imágenes de mujeres republicanas asesinadas «las llamaría al orden y las expulsaría».

«La respuesta de la señora Garrido, ‘expúlsanos’, junto con su actitud desafiante», señala en el comunicado, fue lo que llevó a Le Senne a expulsarlas después de haberlas llamado al orden tres veces. Alude, en este sentido, a la facultad que le confiere el artículo 119.2 del Reglamento de la Cámara para «adoptar las medidas pertinentes para hacer efectiva la expulsión de un diputado sancionado».

Desde la Presidencia se reitera el «compromiso con la democracia, el orden constitucional y la libertad de todos los españoles», y promete trabajar para que «los intereses de los españoles se vean representados en orden y libertad, sin presiones ni chantajes».

En declaraciones a los medios, recogidas por Europa Press, tras el pleno de este jueves, Le Senne ha asegurado que no va a dimitir y ha vuelto a pedir disculpas por haber roto la foto: «Me enfadé e hice lo que no debía». «No odio a ninguna víctima, ni mucho menos, nunca fue mi intención faltar al respeto a ninguna víctima», ha defendido, al tiempo que ha lamentado que «se está sacando todo de quicio».

Abascal defiende a Le Senne:

El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha salido en defensa de Le Senne en un mensaje en su cuenta de X. «Gabriel, te están atacando por defender la neutralidad de las instituciones. Ni un paso atrás ante los golpistas y sus sicarios apesebrados», ha expresado, al tiempo que asegura que su partido defenderá las instituciones «de todos pese a cualquier tipo de agresión». Un respaldo que ha agradecido el presidente del Parlamento balear.

También le han trasladado su apoyo sus homólogos en las Cortes de Aragón, Marta Fernández, de Castilla y León, Carlos Pollán, y de la Comunidad Valenciana, Llanos Massó. «El sanchismo no disimula. Busca el control total de las instituciones, de la primera a la última, bajo el pretexto que sea», ha señalado Pollán, que cree que con Le Senne y con Vox «han pinchado en hueso».

«Gabriel Le Senne intenta mantener la neutralidad de la cámara autonómica y diputados socialistas enarbolando las banderas 'más democráticas', las que causaron millones de muertos y siguen causándolos, se manifiestan contra Gabriel. Algo está haciendo bien», ha expresado por su parte Massó. Juan García-Gallardo, vicepresidente de Castilla y León, ha sido otro de los dirigentes del partido que han salido en su defensa: «Más Le Sennes y menos Armengoles», ha escrito.

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