Navarra facilita a los guardias civiles de Tráfico a que abandonen el cuerpo y se pasen a la Policía Foral

Mejor salario, mejores condiciones laborales y dejar de estar «marginados» por la Administración. Con esta premisa, el Gobierno de Navarra, presidido por la socialista María Chivite, ha publicado en el Boletín Oficial de Navarra (BON) la apertura de una pasarela para que los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil en Navarra se pasen a la Policía Foral después de que Sánchez entregara a la policía autonómica las competencias en exclusiva de Tráfico en Navarra.

Se trata de un paso más dentro de esa expulsión de los guardias civiles de Tráfico de Navarra que fue aprobada por el Congreso de los Diputados el pasado 21 de noviembre. «Se autoriza al Departamento de Interior para que habilite los mecanismo necesarios para permitir la integración en la Policía Foral de los funcionarios de la Administración General del Estado que presten servicios en la Agrupación de Tráfico», reza la norma publicada este 31 de diciembre en el BON.

De esta manera, los agentes de la Guardia Civil de Tráfico que hasta ahora trabajaban en Navarra podrán permanecer en la Comunidad Foral y accederán a los privilegios con que cuentan las policías autonómicas como un mayor salario por el mismo trabajo que venían realizando hasta ahora, un tercer turno laboral, o una jubilación a los 59 años sin perder poder adquisitivo.

Esta «pasarela» es una de las opciones que les queda a los agentes de la Guardia Civil que hasta ahora prestaban sus servicios en la Agrupación de Tráfico en Navarra. Muchos de los cerca de 200 agentes que realizaban este trabajo en la Comunidad Foral llevan décadas en Navarra y tenían una vida personal y familiar asentada en esta región. De ahí que muchos hayan expresado su intención de continuar en Navarra.

Pero para hacerlo así, tras la expulsión de la Agrupación de Tráfico, solo les quedaba la opción de pedir el traslado a otras unidades de la Benemérita en Navarra, algo complicado de realizar dado que el Gobierno de Pedro Sánchez otorga a la Guardia Civil cada vez menos competencias en las comunidades donde el nacionalismo controla el poder.

Los que pretendían continuar en la Agrupación de Tráfico solo tenían la opción de pedir el traslado a otra Comunidad Autónoma con todo el cambio personal y familiar que esto supone.