El presidente de Melilla niega que exista la aduana tras el paso de una sola furgoneta
Ha criticado que «eso está muy liado, muy opaco»
El presidente de Melilla, Juan José Imbroda (PP) ha considerado que el hecho de que el pasado miércoles cruzara una furgoneta con mercancía la frontera entre la ciudad autónoma y Marruecos no se puede considerar que exista una aduana.
«Esto no es una aduana. En teoría es lo que había antes de 2018, no lo de ahora, que no hay nada», ha dicho Imbroda a preguntas de los periodistas, a quienes ha preguntado «dónde está la aduana» a la que se refiere la delegada del Gobierno, Sabrina Moh, que hizo una comparación con la de Algeciras.
Imbroda ha negado esa referencia al recordar que el puerto de Algeciras es el más importante de España en tráfico comercial, «una potencia económica» y tanto su actividad como la de su aduana internacional suponen un porcentaje importante del producto interior bruto (PIB) de Andalucía.
Respecto al hecho de que este jueves no pudiera cruzar un camión desde Ceuta hacia Marruecos, el presidente melillense ha lamentado la falta de seguridad jurídica y, sobre todo, económica que está provocando la apertura de las aduanas en ambas ciudades autónomas con tanta «opacidad».
«No hay seguridad jurídica»
«Eso está muy liado, muy opaco. Imagínate cómo se puede pensar en una actividad comercial o una expedición cuando no sabes si vas a poder pasar o no. No hay seguridad jurídica, sobre todo económica, y eso es un problema para la economía», ha dicho Imbroda.
A su juicio, «esto tiene que ser serio» y no lo es, además de las limitaciones establecidas, con el paso de un solo camión diario y con unas determinadas características que publicó un medio local hace dos semanas.
«Llevamos siete años hablando de lo mismo y escuchando milongas y rancheras a doquier por todos lados», ha criticado Imbroda para rechazar también que la reapertura de la aduana suponga un cumplimiento del Plan Integral de Desarrollo Socioeconómico, como afirmó este jueves la delegada del Gobierno en Melilla, Sabrina Moh.
Imbroda ha advertido de que no está «para bromas», sino para hacer «planteamientos serios», aunque ha avanzado que el pasado miércoles recibió una llamada del Ministerio de Asuntos Exteriores para acordar un contacto telefónico con su titular, lo que supone «un gesto de decir que hay intención de hablar» por primera vez desde el cierre de la aduana hace casi seis años y medio.