El alcalde de La Línea lamenta la «incertidumbre bestial» con Gibraltar a casi 10 años del Brexit

El alcalde de La Línea de la Concepción, Juan Franco, denuncia que sigue sin tener «una respuesta clara a las reivindicaciones de la ciudad y la situación en que va a quedar» una vez se produzcan los acuerdos de negociación entre los Gobierno español y británico a cuenta de Gibraltar. En una comparecencia este martes, Franco, del partido La Línea 100x100, ha recordado que el referéndum del Brexit se produjo en junio de 2016 y cerca de una década después sigue habiendo una «incertidumbre bestial».

El primer edil linense reivindica que el Ayuntamiento fronterizo «debería estar presente» en la mesa de negociación e informado «conforme las propuestas se vayan haciendo», porque puede suceder que se adopten acuerdos que acaben siendo negativos para la ciudad, como por ejemplo, apunta, con el aeropuerto.

«La ciudad se va a encontrar de un día para otro con un aeropuerto internacional ahí», explica Franco, quien cree que «bien redactado», podría ser «un motor de impulso y desarrollo importantísimo». «Qué consecuencias tiene eso, cómo afecta al desarrollo del centro tecnológico previsto en el recinto ferial, por dónde van a sacar las mercancías, cómo va a afectar eso a la movilidad de tráfico en la ciudad», se ha preguntado.

Franco teme que «en el momento y hora en el que el Gobierno de España imponga ciertas restricciones, marcadas por ley, al paso de ciudadanos no Schengen, británicos, incluyendo ahí a los gibraltareños, me puedo encontrar con una cola que colapse todo el frontal marino de Poniente». Ante este temor, lamenta que el Gobierno central haga oídos sordos: «Todavía estoy esperando que me contesten».

Un colapso anunciado

Ya en octubre se produjo un colapso circulatorio que afecto a la movilidad, el tráfico y el trabajo de los habitantes de ambos lados de la valla después de que «un inspector de policía, responsable del puesto fronterizo, como no tenía instrucciones precisas, empezó a aplicar normativas, y Gibraltar empezó a aplicar también las suyas. La crisis duró una hora. »Fue un experimento que demuestra a qué nos enfrentamos en el caso de que no se llegara a una solución clara respecto de este asunto", ha añadido Franco.

Ante esta situación, el alcalde ha anunciado que redoblará la presión para que el municipio sea escuchado. Por ejemplo, repetirá la visita que ya realizó en marzo de 2018 al Parlamento Europeo. «Espero que podamos llegar también a otros organismos, como por ejemplo el Comité Europeo de las Regiones, que ya en 2018 elaboró un documento donde advertía de las consecuencias que podía tener un acuerdo mal negociado o un no acuerdo», ha indicado.

Paralelamente, iniciará una ronda de contacto con diputados y senadores a nivel nacional e invitará a la ciudad a los distintos parlamentarios de Andalucía, «para que se puedan convertir en altavoz de nuestras necesidades en el Parlamento Europeo». Franco pretende insistir ante los gobiernos de la Junta de Andalucía y de España para que «podamos seguir llevando la voz de nuestra ciudad a todas las instituciones que tienen una mínima capacidad decisoria en esta historia».