La «grave situación» que mantiene enfrentados a sindicatos y dirección del Hospital Clínico de Málaga

El Sindicato Médico de Málaga (SMM), en su lucha contra la gestión llevada a cabo por la actual dirección del Hospital Clínico Universitario Virgen de la Victoria, ha presentado un documento, refrendado por la firma de 300 facultativos y entregado a la dirección gerencia y a la dirección médica del centro, en el que recogen, según sus propias palabras, el reflejo de «la preocupante situación que atraviesa el hospital».

En el citado documento, el SMM plasma todas sus quejas, centradas principalmente «en la falta de empatía y en las precarias condiciones laborales a las que se ven sometidos los profesionales». Desde la dirección lamentan «la actitud» mostrada por el sindicato y el «cuestionamiento de todos los esfuerzos que se llevan a cabo día a día para dar la mejor respuesta» a las necesidades del centro y de los pacientes.

Entre todas las protestas recogidas en el escrito, destacan los «servicios infradotados de profesionales que generan una situación insostenible, poniendo en riesgo la calidad asistencial» o el «aumento desmedido de la carga de trabajo, por encima de los ratios médico-paciente recomendados», así como la problemática ocasionada porque «no se cubren las bajas, jubilaciones y reducciones de jornada». Frente a eso, el Hospital ha mostrado su disconformidad, alegando que se ha «aumentado el porcentaje que se ha cubierto de todas las bajas laborales y reducciones de jornada solicitadas por los profesionales, con todo el esfuerzo que esto supone».

Por otro lado el sindicato también ha denunciado la «falta de medidas contundentes para controlar las agresiones, cada vez más frecuentes», el «importante déficit en los dormitorios médicos de todos los centros del complejo donde se obliga a descansar en literas comunes durante las jornadas de trabajo de 24 horas, sin hacer distinción por especialidad ni sexo o en espacios destinados a otros fines que carecen de la dotación necesaria» y la «ausencia de comedores adecuados» o los «menús de baja calidad y dudosamente saludables» de los centros.

Desde el Hospital señalan que el SMM es consciente de que «se han construido nuevas instalaciones de residencia médica y otras actuaciones para facilitar el descanso en la guardia de los facultativos» y aseguran que el menú que se sirve para el personal «es el mismo para el público» y «cumple con todas las garantías higiénico-sanitarias y se encuentra sometido a todos los controles periódicos establecidos». Además, se ha reforzado la vigilancia en las diferentes entradas y se ha restringido el paso en varias zonas clave «para mejorar las condiciones de seguridad».

En el comunicado, el sindicato tacha de «fracaso rotundo» el intento de contratación de médicos para los servicios de urgencias, lo que ha ocasionado que se «castigue este verano a los profesionales que no estén de vacaciones a realizar un trabajo muy superior al habitual en un servicio en el que la demanda de julio y agosto es superior al resto del año», exigiendo que tomen «medidas urgentes para revertir esta situación y garantizar el bienestar del personal sanitario».

Frente a esto, la dirección del Clínico ha tachado de «falta de consideración» por parte del SMM a los «continuos esfuerzos llevados a cabo por la dirección del hospital de cara a la contratación de facultativos para la cobertura asistencial de estos meses estivales, con la dificultad bien conocida que esto supone», asegurando que, desde la dirección, su objetivo principal es dar siempre «la mejor respuesta», tanto a los pacientes como a los trabajadores.