Málaga
Muere en la ruta de El Chorro un joven senderista británico tras sufrir una caída
Sus compañeros llamaron al 112 alertando de que la víctima se encontraba inconsciente
Un joven de unos 20 años de edad y de origen británico ha fallecido este miércoles en el enclave montañoso de El Chorro, en el municipio de Álora, tras sufrir una caída mientras se encontraba practicando senderismo junto a un grupo de personas.
Tal y como han informado las autoridades, el teléfono de Emergencias 112 Andalucía recibió una llamada de auxilio cerca de las 11:00 horas, alertando de que una persona se había caído en la citada ruta y, según advirtieron sus acompañantes, se encontraba inconsciente. El accidente se produjo mientras la víctima se encontraba realizando la vía ferrata de El Chorro, en la zona conocida popularmente como Puente del Mono.
Inmediatamente después de recibir el aviso, el centro coordinador movilizó a los servicios sanitarios y a efectivos de la Guardia Civil. Hasta el lugar del accidente se desplazaron dos helicópteros, uno del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña de la Guardia Civil (GREIM) y otro del Centro de Emergencias Sanitarias 061, que aterrizó en el helipuerto de Álora.
Según ha dado a conocer la Guardia Civil, cuando los agentes consiguieron acceder al lugar donde se encontraba el joven, pudieron constatar que se encontraba en parada cardiorrespiratoria. A pesar de realizarle la reanimación cardiopulmonar y evacuarlo rápidamente hasta el helicóptero, donde se hallaban los servicios médicos, los sanitarios sólo pudieron confirmar su fallecimiento.
Esta no es la primera vez que un senderista sufre un accidente en la zona de El Chorro, aunque con resultados menos drásticos. Y es que las áreas para montañistas expertos suelen ser lugares donde abundan los percances. El último tuvo lugar el pasado mes de octubre, cuando un escalador de origen polaco tuvo que ser evacuado tras sufrir una caída en la vía conocida como Blue Line, una pared de 300 metros de altura. El complicado rescate se realizó descendiendo en rápel desde una altura de 150 metros hasta el suelo, con ayuda de un helicóptero del GREIM.