El Conservatorio de Danza de Sevilla, un edificio histórico en riesgo de derrumbe: «Se nos cae encima»

El Pabellón de Argentina, sede del Conservatorio Profesional de Danza de Sevilla, se encuentra en riesgo de derrumbe. El histórico edificio que se levantó con motivo de la Exposición Iberoamericana de 1929 se cae «a cachos», según los alumnos del centro, que demandan uno nuevo, adaptado a las necesidades de sus enseñanzas, como en su día les prometieron.

Las instalaciones actuales presentan un pésimo estado. La antigua capilla del Pabellón de Argentina, transformada en el aula más grande del Conservatorio, se encharca cada vez que llueve en abundancia, lo que obliga a su cierre, como ocurrió hace apenas unos días. Además, por riesgo de derrumbe de los balcones, se han clausurado dos aulas de forma permanente.

El patio interior del Conservatorio ha estado completamente vallado durante tres meses ante una eventual caída de tejas y azulejos. No obstante, el centro se ha visto obligado a abrir una parte del patio por el cierre de las escaleras que dan acceso a las dos aulas clausuradas.

En consecuencia, en el edificio hay montado un circuito de vallas. «Es como un laberinto, porque está todo vallado, pero eso es lo de menos», afirma Manuela, una de los 700 alumnos del Conservatorio, más preocupados por las grietas en las paredes. «En cualquier momento se nos puede caer encima», añade.

Las ventanas están prácticamente todas rotas. Muchas de ellas no abren, una circunstancia insoportable en épocas de calor, habida cuenta de que la mayoría de las aulas no están climatizadas. «Hay cinco clases contadas con aire acondicionado», asegura otro alumno.

El anexo Pabellón de Guatemala, donde se ubican dos aulas del Conservatorio de Danza de Sevilla, también sufre el mismo deterioro. Es rara la ventana que no tiene los cristales rotos. Las barras de las cortinas, además, se encuentran en su mayoría descolgadas, con el consecuente riesgo de que se caigan en la cabeza de algún alumno.

Los alumnos, por lo general, sufren más el calor que el frío, ya que hace unos años instalaron una caldera en el edificio. Sin embargo, las duchas no funcionan correctamente y los alumnos se tienen que duchar con agua fría.

Por otro lado, el estado de las aulas dificulta la enseñanza de los futuros bailarines. Las clases tampoco están insonorizadas, por lo que la música proveniente de terceras aulas se cuela por las paredes y desconcentra a los alumnos por el ruido que se forma. No en vano se quejan de que el centro no está adaptado a las necesidades de sus enseñanzas.

Para más inri, el centro no tiene personal administrativo ni conserje por las mañanas. Cuenta apenas con dos limpiadoras, pero su contrato es de mañana, por lo que por las tardes no hay servicio de limpieza. El abandono es total. Los alumnos lamentan que nadie ponga remedio a esta situación, que llevan padeciendo desde hace años.

Años de abandono

El Ayuntamiento de Sevilla, gobernado por el Partido Popular, ha instado a la Junta de Andalucía, también gobernada por el PP, a realizar con urgencia obras en el Conservatorio Profesional de Danza por riesgo inminente de derrumbe del Palacio de Argentina, bien patrimonial protegido del que es responsable la Consejería de Desarrollo Educativo.

Los servicios técnicos de Conservación de la Edificación de la Gerencia de Urbanismo del Consistorio hispalense realizaron el pasado 17 de enero una visita de inspección al Conservatorio y constataron «la necesidad de adoptar medidas de carácter inminente en la finca de referencia». En concreto, «existe amenaza de desprendimientos a la vía pública» de algunos elementos de la edificación.

El estado actual del inmueble es consecuencia de años de abandono institucional y caso omiso al alumnado del centro. En 2008, la Junta de Andalucía, entonces gobernada por el PSOE, anunció que los conservatorios profesionales de Música y Danza de Sevilla contarían con una nueva sede conjunta en el barrio de Nervión.

Todo aquello acabó en un cajón del que el PP no ha sacado, pese a su insistencia en la oposición en el Parlamento de Andalucía. 16 años después, las demandas tanto del alumnado como del profesorado del Conservatorio de Danza siguen sin ser atendidas, pese a que, además de no responder a las necesidades de las enseñanzas, el Pabellón de Argentina se les cae encima.