Casa Real  El Rey volverá a Barcelona a defender el Estado de derecho en plena campaña de señalamiento a los jueces

El Rey acudirá el próximo jueves a Barcelona para entregar los despachos a los 137 nuevos miembros de la carrera judicial. Como es habitual en este acto, Don Felipe pronunciará un discurso en el que volverá a defender el Estado de derecho y la independencia judicial, y dirigirá unas palabras a los jueces, que en estos momentos están sufriendo una campaña de señalamiento y desprestigio sin precedentes por parte del Gobierno, que les acusa de actuar por criterios políticos.

En este acto también intervendrán la presidenta del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, Isabel Perelló, quien hace un mes tuvo que salir en defensa de la independencia judicial ante las acusaciones del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la directora en funciones de la Escuela Judicial, Clara Carulla.

También suele acudir —aunque no interviene— el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, quien no solo se niega dimitir tras su imputación por supuesta revelación de secretos, sino que sigue acudiendo a los actos que preside el Rey como si no pasara nada. De hecho, el fiscal imputado también asistió el pasado diciembre junto a Don Felipe a la entrega de despachos a los nuevos fiscales, a los que llegó a pedir en público que cumplieran la ley y fueran imparciales.

La ley Begoña

Ya en la entrega de despachos de hace un año, los jueces se encontraban en la mira del Gobierno por sus críticas a la ley de amnistía, que se acabó aprobando en mayo para borrar los delitos a sus socios independentistas. Pero ahora el Gobierno ha dado un paso más, y les intenta desprestigiar y neutralizar con la llamada «ley orgánica de garantía y protección de los derechos fundamentales frente al acoso derivado de acciones judiciales abusivas». Más conocida como ley Begoña, esta iniciativa legislativa ya ha sido registrada como proposición de ley en el Congreso de los Diputados para eludir los informes de los altos órganos consultivos.

Si se aprueba esta ley, no se podrán investigar los supuestos delitos cometidos por la esposa del presidente del Gobierno, Begoña Gómez, ni por su hermano, David Sánchez, porque se restringirá la acusación popular.

Pero esta ley también permitirá recusar a los jueces y magistrados que hayan hecho manifestaciones políticas e impedirá presentar querellas basadas en denuncias publicadas en los medios de comunicación.

Contra esta ley ya se han pronunciado las principales asociaciones de jueces, como la Asociación Profesional de la Magistratura (APM) —mayoritaria—, el Foro Judicial Independiente, la Asociación Judicial Francisco de Vitoria (AJFV) y Juezas y Jueces por la Democracia, que se define como progresista.

El discurso del Rey

Después de entregar los despachos a los nuevos jueces -92 mujeres y 45 hombres-, Don Felipe les dirigirá unas palabras en un contexto que cada vez se presenta más tenso y complicado. Ya el año pasado advirtió de que «la independencia del Poder Judicial como institución es imprescindible para el adecuado funcionamiento de nuestra democracia, así como la de cada juez en el ejercicio de su función jurisdiccional». También manifestó que «el respeto a las resoluciones dictadas por los órganos judiciales y la igualdad de todos ante la ley son condiciones indispensables de la democracia».

Aunque los discursos del Rey deben contar con el refrendo del Gobierno, dicho refrendo ha de ser compatible con las funciones que la Constitución otorga al Jefe del Estado, como es «arbitrar y moderar el funcionamiento regular de las instituciones», y no puede limitar la necesaria libertad del Rey para poder reinar.

La ceremonia se celebrará a las doce del mediodía del próximo jueves en el Auditorio Fórum del Centro de Convenciones Internacional de Barcelona.