El legado de la Bauhaus y GATCPAC en Barcelona

La Staatliche Bauhaus fue la escuela de arquitectura, diseño, artesanía y arte que fundó Walter Gropius en 1919 y que acabó en 1933, al cerrarla el Partido Nazi. Es la escuela más influyente de la primera mitad del siglo XX, que fue clave en el diseño industrial, la arquitectura, la fotografía, la pintura y las artes en general. Entre los miembros más destacados tenemos a Wassily Kandinsky, Paul Klee, Ludwig Mies van der Rohe, László Moholy-Nagy, Arieh Shalom, Horacio Copola y Walter Gropius.

Las huellas de la Bauhaus impregnaron Barcelona en dos aspectos claramente diferenciados. El primero son obras de esta escuela en la ciudad y el segundo es la influencia en los arquitectos catalanes, pues fundamentalmente influenciaron a estos más que a otras artes.

Respecto al primer aspecto, en la montaña de Montjuïc, muy cerca de la Fuente Mágica de Carlos Buïgas, encontramos el Pabellón Mies van der Rohe. En 1928 recibió el encargo de participar en la Exposición Universal que se celebraría en Barcelona en 1929. El arquitecto y su colaboradora y diseñadora Lilly Reich proyectaron un edificio de planta libre, espacios flexibles y unos materiales constructivos —vidrio, mármol, acero— que fomentaban la ligereza del conjunto.

Aquella obra, emblema de la Bauhaus, fue derribada en 1930, al finalizar la Exposición. A mediados de la década de los 80, gracias a los arquitectos Oriol Bohigas e Ignacio Solá-Morales, se recuperó el Pabellón. La obra se pudo volver a visitar en 1986. Hoy en día es el emblema de la Bauhaus en Barcelona, y quien no lo haya visitado no puede perderse esta maravilla.

Otro símbolo de la Bauhaus, también de Mies van der Rohe y Lilly Reich, es la silla Barcelona, modelo MR90. Un concepto de «menos es más». Era un asiento para la realeza española, aunque nunca la utilizaron. La silla en piel y estructura de acero la produce Knoll desde 1948. También diseñaron la otomana, la mesa auxiliar y el diván Barcelona.

Se puede decir que Barcelona fue pionera antes que la Bauhaus. Fue la Escuela del Trabajo, proyectada a finales del siglo XIX, abriendo centros educativos como La Massana y Elisava. Sin embargo, su influencia no fue tan importante y adoptaron los estilos de la Bauhaus, sin crear uno propio.

En el año 1929 se unió un grupo de arquitectos cuyo interés era promover la arquitectura racional. Entre 1930 y 1931, el arquitecto Josep Lluís Sert, junto con otros arquitectos de la Bauhaus, trabajaron con Walter Gropius en Berlín. En 1932 se celebró en España el Comité Internacional para la Resolución de Problemas de Arquitectura Contemporánea (CIRPAC), al que acudió Gropius. Gracias a aquella reunión, Sert obtuvo la dirección de la construcción del Pabellón español en la Expo Universal de París de 1937.

En la década de 1930 se fundó en Cataluña el Grupo de Arquitectos y Técnicos Catalanes para el Progreso de la Arquitectura Contemporánea (GATCPAC). Este grupo bebió de las ideas de Charles-Édouard Jeanneret-Gris, conocido como Le Corbusier, y de la filosofía de la Bauhaus. Los miembros de la GATCPAC apostaron por la arquitectura sin ornamentos, hecha con materiales representativos de la modernidad, como el ladrillo, el acero, el hormigón y el vidrio.

Entre los miembros del GATCPAC destacamos a Josep Lluís Sert, José Torres Clavé, Juan Bautista Subirana, Sixte Illescas, Germán Rodríguez Arias y Ricardo de Churruca. En Barcelona idearon lo que se conoce como Plan Macià.

El plan preveía una distribución funcional de la ciudad con un nuevo orden geométrico, a través de grandes ejes vertebradores como la Gran Vía de las Cortes Catalanas, la Avenida de la Meridiana y la Avenida del Paralelo, y con una nueva fachada marítima definida por rascacielos cartesianos, además de la mejora de equipamientos y servicios, el fomento de la vivienda pública y la creación de un gran parque y centro de ocio junto al delta del Llobregat, la llamada Ciudad de Reposo y Vacaciones. El inicio de la guerra civil truncó el proyecto. El nombre estaba inspirado en el presidente de la Generalidad de Cataluña Francesc Macià.

Entre las obras relacionadas con GATCPAC, y que aún pueden visitarse en Barcelona, tenemos la Casa Bloc, en el Paseo Torres i Bages número 101; el Dispensario Central Antituberculoso, en el Pasaje San Bernardo número 10; Casa Vilaró en la Avenida del Coll del Portell número 67; Casa López, en la calle Muntaner 342-348; Viviendas Vía Augusta en la Vía Augusta número 61; Viviendas y Cine Astoria, en la calle París 193-199; Joyería J. Roca, en el Paseo de Gracia 18, hoy Joyería Tous; Casa Barangé, en la Plaza Mons número 4; Casa Rosales, en la calle Iradier número 3; Casa de Cristal, en la calle Pádua número 96; y Viviendas Diagonal, en la Avenida Diagonal número 419-421.

Además de esta, de Josep Maria Sert tenemos la Fundación Joan Miró, muy cerca del Pabellón Mies van der Rohe, o la Porta Catalana, en la autopista AP-7 en La Junquera. Sert y Gropius coincidieron en los Estados Unidos, siendo Sert el sucesor de este como decano de la Universidad de Diseño de Harvard.

Gran parte de los miembros del GATCPAC apoyaron al bando republicano durante la guerra civil. El GATCPAC no tuvo legado en España hasta la década de 1950, cuando sus publicaciones dejaron de ser censuradas durante la dictadura y su obra fue recogida por una nueva generación de arquitectos modernos españoles como Oriol Bohigas e Ignacio Solá-Morales.