
Una mezquita en Terrassa (Barcelona)
Cataluña
Vox pide que se ponga fin al Programa de Lengua Árabe y Cultura Marroquí en Cataluña: «Fuera islamistas de nuestras aulas»
Desde Vox advierten que no se facilita la integración de los estudiantes de Marruecos, en este caso
También advierten del peligro que supone que el profesorado sean funcionarios elegidos por Marruecos, sin supervisión de las autoridades españolas
Vox pide que se ponga fin en Cataluña al Programa de Lengua Árabe y Cultura Marroquí (PLACM), porque pone en «riesgo la cultura nacional» y no facilita la integración de los alumnos extranjeros, en este caso, los que proceden de Marruecos. Así lo pide el diputado Manuel Acosta en una propuesta de resolución que se ha presentado en la Comisión de Educación de la cámara catalana.
Para hacer esta petición, Vox se basa en el número de alumnos participantes en este programa, que van en aumento, y que busca, recuerda, «la promoción de la cultura marroquí mediante la enseñanza en escuelas españolas de primaria y secundaria». Está financiado por el Gobierno de Marruecos, a través de la Fundación Hassan II. Una fundación que, por cierto, «se dedica a enviar imanes a países europeos para guiar a los inmigrantes marroquíes residentes en estas naciones», se precisa en el texto.
Yendo a las cifras, según el Observatorio Permanente de inmigración (2024), en España hay 896.076 marroquíes, de los cuales 226.859 están en Cataluña. Y con datos del Ministerio de Educación, en el curso 2020-2021 se impartieron clases, en el marco de este Programa, en 362 centros españoles, de los que 139 eran catalanes. Participaron 1.607 alumnos y 32 profesores. Y el curso pasado, ya participaron 2.484 alumnos y 33 profesores. Se impartieron clases en 128 centros. Aunque se dieron cifras más elevadas antes de la pandemia. Por este motivo, y ante ese incremento constante, advierten el diputado Manuel Acosta que «no solo se pone en riesgo la cultura nacional, sino que se gira en contra de la integración de alumnos procedentes de Marruecos».
Y lo que se debe promover, asegura, teniendo en cuenta que la tendencia demográfica implica el incremento exponencial de más población inmigrante de procedencia marroquí, es su «adaptación cultural» a la cultura española. De ahí, asegura Acosta que «no podemos admitir la promoción, financiación y dotación de aulas cuyo objetivo pretende menoscabar la cultura nacional y crear confrontaciones culturales que no llevan más que a la segregación cultural».Pero no se trata solo de los alumnos. Recuerda el diputado de Vox que los profesores son funcionarios elegidos por Marruecos para ejercer en España. Y, por lo tanto, no están bajo supervisión de las autoridades competente, es ya sea la española o la catalana. Y de hecho, las escuelas catalanas se limitan a ceder aulas para que se lleve a cabo la actividad docente.
Pero también recuerda Vox, y con relación a la selección de profesores, el caso de Ayman ADlibi, líder de la Comisión Islámica Española, que fue investigado por terrorismo, ya que «que resultó ser responsable de una red yihadista cuyas donaciones financiaban a grupos ligados a Al Qaeda en Siria».