Barcelona acogerá una manifestación para reivindicar una asignatura LGTB en las escuelas

Este año la campaña Social del Pride Barcelona 2024 lleva como lema «Educación en diversidad sexoafectiva y de género: asignatura pendiente». Y esta petición será también uno de los ejes de la manifestación que se celebrará el próximo 20 de julio en la capital catalana. Para ilustrar la campaña, que cuenta con el apoyo del Ayuntamiento de Barcelona y de la Generalitat, se han editado carteles en los que se simula un dibujo hecho por un niño y con palabras como «bollera», «travelo» o «maricón».

Además de los carteles, se ha difundido un vídeo en el que aparecen niños de corta edad a los que se les pregunta qué les parece si un niño dice sentirse que se siente como una chica; qué le dirían a alguien que se ría de un niño al que le guste llevar falda o maquillarse; también les preguntan si creen que cualquier persona puede querer a quien quera «sea quien sea»; o qué pasaría si un compañero de clase les explica que tiene dos madres.

Los impulsores de esta iniciativa consideran que ahora «es el momento de ir a la raíz del problema», que no es otra que una «raíz cultural» que está muy incrustada en la sociedad y que supone un «foco de desigualdades pero también de odio y de rechazo, central en los idearios de las fuerzas de ultraderecha y ultracatólicas». Y, en este sentido, consideran que la educación «es el pilar fundamental» para combatir «la violencia, la incomprensión y la enorme desinformación que hay sobre las existencias disidentes».

Por este motivo, creen que es necesario «incorporar la perspectiva LGTBIQ+ en la escuela para conseguir una igualdad de trato y no discriminación en todas las etapas de la vida». Y se dirigen especialmente a la Generalitat para que incorpore «la perspectiva de género y diversidad afectivosexual en el currículum catalán»; que se forma al profesorado, a las direcciones de los centros y la inspección educativa en esta materia; que haya protocolos de asistencia y acompañamiento al alumnado y profesorado LGTBI+ ante agresiones; que haya materiales educativos «de difusión y aprendizaje de a perspectiva de género y la diversidad sexoafectiva que sirvan de modelos positivos para todo el alumnado»; y que los centros educativos sean «espacios seguros» en los que el «alumnado transgénero puede ver su identidad de género reconocida».

Ideología de género

En este sentido, el presidente de Vox en el Ayuntamiento de Barcelona, Gonzalo de Oro, considera que el Ayuntamiento de la capital catalana no debería apoyar este tipo de manifestaciones sobre la asignatura de Educación en diversidad sexoafectiva y de género: «dejen a los niños en paz, la izquierda tiene fijación en querer introducir la ideología de género en la educación sexual, no tienen suficiente con el adoctrinamiento político».

Y también pide explicaciones al alcalde, Jaume Collboni, por si el consistorio ha financiado con dinero público la publicidad y la organización de la manifestación del 20 de julio. Asegura que es de «muy mal gusto apoyar desde instituciones como Ayuntamiento o Generalitat carteles con las palabras 'bollera', 'maricón' o 'travelo' acompañada por un dibujo infantil».

De Oro recuerda que «los niños deben ir al colegio para aprender lengua, matemáticas, ciencias naturales y resto de asignaturas que garanticen su aprendizaje y ofrezca los conocimientos académicos necesarios para su formación y no a que un profesor, sin conocimiento previo de los padres, enseñe a los niños nada sobre su sexualidad». Para el líder de Vox es necesario «proteger a los niños y su inocencia» y considera que no se pueden permitir «imposiciones que para nada benefician en el buen desarrollo educativo de los niños».