Iker, edil de Vox en Vacarisses (Barcelona): «No me cogieron en el casting por ser concejal de Vox»

Iker tiene 19 años y es concejal en Vacarisses, un pequeño pueblo de la provincia de Barcelona. Está estudiando bachillerato y le gustaría, posteriormente, hacer Derecho. Pero lo que también le apasiona, y mucho, es el teatro y lo relacionado con el terror. Por este motivo, cuando cumplió 18 años, el año pasado, decidió presentarse al casting para hacer de hacer en el parque temático relacionado con el terror, Horrorland.

Para ello, ha explicado, no pedían ningún tipo de «experiencia previa» ni «ningún requisito. Vamos, que cogen a todo el mundo» para sus espectáculos, añade. Él fue a las oficinas de la empresa, junto con unos amigos, y presentó su currículum. Eso sí lo pedían. Iker explica que «comenté mi situación de concejal a la chica que me hizo una entrevista. Y le hizo bastante gracia, porque veía que yo era muy jovencito».

El problema es que otro compañero, que también estaba en las oficinas, se acercó, y según el joven, ya advirtió: «vaya, eres concejal. Mientras no seas de Vox, ningún problema. Si no, serás expulsado directamente». Ahí, asegura, Iker, «ya sabía que no me iban a coger. Y, efectivamente, así fue, no me cogieron».

Aun así, y como le gusta lo relacionado con el terror, se acercó a las instalaciones del parque temático, como cliente, para visitarlas. Asegura que se encontró «con varias situaciones un poco extrañas». Se supone, nos explica, que la entrevista para el casting tenía que ser «privada», pero resulta que «medio parque sabía de mi situación como concejal. Y muchos de los actores hacían bromas con eso». Y la gota que colmó el vaso fue lo que le dijo una de las actrices que se encontraba en una de las casas de terror: «esto te lo pagas tú o te lo paga Vox con dinero público. Que luego decís que no robáis».

Para Iker fue un «comentario totalmente desafortunado». Pero es que, en otra visita, la persona que se encontró en las oficinas el día del casting, se acercó a él y le dijo: «deberías hacerte comunista. Vox da asco. Y no sé como puedes estar ahí». El joven quedó muy tocado con estas palabras, teniendo en cuenta, además, que, como cliente, se había dejado «mucho dinero» para visitar el parque del terror.

Pero Iker es inasequible al desaliento, y este año lo volvió a intentar junto con otros amigos. Se presentó nuevamente al casting. Ninguno tenía experiencia como actor. Los cogieron a todos, excepto a él. «Cogieron a un amigo que tiene un currículum de informático, no tiene nada de actor, y el perfil no es que fuera de lo más interesante para lo que buscaban. Y es más, yo encima tenía un currículum más completo que el año anterior, porque había hecho un curso en una academia de teatro de Barcelona bastante reconocida, con prestigio». Pues ni por esas.

Para Iker es blanco, y en botella. El problema es que es concejal de Vox. Y asegura que le «da rabia» porque lo hace «porque le encanta. No es por cuestión de dinero, porque no va a ser mi trabajo principal». Y ha decidido dar el paso y denunciar esta situación porque no «voy a permitir este tipo de discriminación hacia nadie. Esto es vergonzoso que pase en una empresa supuestamente seria».

Iker ha escrito a la dirección de la empresa propietaria de ese parque temático, pero asegura que ha recibido «la indiferencia» como respuesta.