Parque de la España Industrial, en Sants
Sociedad
Así es Sants, el antiguo pueblo convertido en uno de los mejores barrios de Barcelona
Con una rica historia industrial y una vibrante vida cultural, Sants se ha transformado en uno de los barrios más atractivos para vivir en la ciudad condal
El barrio de Sants, el más extenso y antiguo del distrito que lleva su nombre, tiene una historia que se remonta al siglo XIX. Originalmente, un pueblo obrero, Sants fue hogar de numerosas fábricas textiles que definieron su carácter industrial. Una de las más destacadas es El Vapor Vell, una antigua fábrica que, desde el año 2001, ha sido reconvertida en una biblioteca y escuela, preservando su legado histórico.
De pueblo a barrio barcelonés
El 20 de abril de 1897, Sants se integró oficialmente en Barcelona a través de un decreto firmado por la reina María Cristina. Esta anexión no solo transformó su geografía, sino también la vida de sus habitantes. Antes de la anexión, el crecimiento del barrio se disparó, impulsado por la industrialización y la llegada de mano de obra, lo que permitió que la población se multiplicara por cinco entre 1850 y el momento de su incorporación a Barcelona.
Un factor clave en la evolución de Sants fue la construcción de la estación de tren de Sants en 1875, que facilitó la conexión con Barcelona y pavimentó el camino para la fusión. La iglesia parroquial de Santa Maria de Sants, construida en el siglo XV, es uno de los símbolos históricos del barrio que ha resistido el paso del tiempo, siendo aún un punto de referencia fundamental para la comunidad.
Un epicentro comercial y gastronómico
Hoy en día, Sants destaca no solo por su historia, sino también por su importancia comercial. La calle de Sants y la calle de la Creu Coberta forman uno de los ejes comerciales más grandes de Europa, atrayendo a visitantes y residentes por igual. Además, el barrio es un lugar donde la tradición y la modernidad se fusionan, con una gran diversidad de bares y restaurantes que ofrecen desde platos tradicionales catalanes hasta innovadoras propuestas culinarias.
Un lugar de encuentro
La plaza de Sants, con su estatua dedicada al médico e historiador Joan Pelegrí, es uno de los principales puntos de encuentro del barrio. Allí, los vecinos se reúnen para disfrutar de la vida al aire libre y celebrar eventos locales que refuerzan el sentido de comunidad que caracteriza a Sants.
