Ciudad
Barcelona recupera la Massana, pero hay otros 21 edificios propiedad del Ayuntamiento que siguen okupados
El consistorio desalojó a los okupas del edificio del Raval en una tensa jornada que terminó en una manifestación de unas 2.500 personas
Tras una mañana movida en la que resultaron heridos 19 agentes de los Mossos d’Esquadra y fueron detenidos cinco manifestantes –y una tarde no menos movida, con unos 2.500 manifestantes, según la Guardia Urbana, tratando de volver a entrar–, el Ayuntamiento de Barcelona logró este martes desalojar a los okupas del edificio de la Antigua Massana, que se hicieron con el control de este espacio situado en el Raval durante la pandemia del Covid-19, en 2021.
«Es el punto y final del expediente», aseguraba el teniente de alcalde de Seguridad y Prevención del Ayuntamiento de Barcelona, Albert Batlle, que ha celebrado la «recuperación» del espacio. La intención del consistorio es llevar a cabo un nuevo proyecto «preservando los usos académicos, culturales y comunitarios» del edificio, que acogió una escuela de artes aplicadas –ahora situada en el edificio que está enfrente– y antes de eso fue el Hospital de la Santa Cruz.
Nueva etapa, por tanto, para uno de los casos de okupación de un espacio municipal que llevaba años enquistado, pero que no es, ni mucho menos, el último. «Ahora Collboni debe seguir y desalojar los 21 edificios municipales que siguen okupados», reclamaba este martes el líder del PP en el consistorio barcelonés, Daniel Sirera, señalando el que debe ser, a su juicio, la prioridad: el recinto de Can Vies, «en el que los okupas hacen y deshacen con total impunidad».
Se han cumplido ya más de diez años desde que, en la primavera de 2014, un intento de desalojar este ‘templo okupa’ de Barcelona provocó una oleada de altercados que hicieron desistir al gobierno municipal, entonces en manos de Xavier Trias. Hace unos meses, el Ayuntamiento reabrió el debate sobre qué hacer con Can Vies, presentando a los vecinos de la zona una propuesta técnica para reordenar el entorno que incluía la recalificación de la finca okupada como equipamiento.
La mayoría, okupas «reivindicativos»
La cifra aportada por Sirera viene de los datos hechos públicos por el Ayuntamiento en febrero de 2024, en respuesta a una pregunta del PP en la Comisión de Presidencia. Según este informe, al que ha tenido acceso El Debate, de los 21 edificios municipales que siguen okupados tras la recuperación de la Antigua Massana, hay 15 que se consideran «okupación reivindicativa» y otros seis, «okupación delictiva».
El distrito que concentra más edificios municipales okupados es Sant Andreu (6), seguido por Horta-Guinardó (5) y de los de Sants-Montjuic y Nou Barris, con tres cada uno. En el Eixample, Gracia y Les Corts no hay ningún edificio okupado de titularidad municipal. A falta de datos actualizados, hace poco menos de un año había en Barcelona un total de 202 espacios okupados, de los que 117 (58%) son okupaciones reivindicativas.
Cabe señalar que este informe no incluía las okupaciones «catalogadas como infravivienda o de carácter social». En el documento, elaborado según datos de la Guardia Urbana de Barcelona, también se recoge que las «ocupaciones sociales» representan un 65 % del conjunto, «seguidas de las delincuenciales (20 %) y las ideológicas (15 %)».
Según los últimos datos anuales disponibles –los de 2023–, Barcelona es la provincia que más okupaciones ilegales registra en toda España. En concreto, de las 15.289 denuncias contabilizadas ese año, un 30,1 % (4.610) tuvieron lugar en la provincia barcelonesa, que triplica a la de Madrid, la siguiente en la lista.