Cinco detenidos en Alicante tras asaltar una vivienda donde amordazaron y encañonaron a su propietario
A los arrestados se les imputan los delitos de robo con violencia e intimidación, detención ilegal, tenencia ilícita de arma prohibida, estafa y apropiación indebida
La Policía Nacional ha detenido a cinco personas por su presunta implicación en el asalto y robo en una vivienda, localizada en una zona rural de la ciudad de Alicante, cuando su propietario estaba dentro y a quien dos varones encapuchados, encañonaron con un arma de fuego y ataron con bridas a una silla mientras que registraban la vivienda en busca de efectos para robar.
Tras la investigación, se certificó que había otras tres personas involucradas en el suceso, dos mujeres y un varón más, deteniéndose a cuatro implicados en Alicante y a un quinto en la localidad granadina de Zújar.
De los hechos se tuvo conocimiento tras una llamada de la propia víctima al 091 manifestando que, durante la noche, habían entrado en su casa de modo sorpresivo dos varones encapuchados y armados; uno de ellos con una navaja, y el otro con una escopeta quienes, tras encañonarle, le ataron a una silla con bridas mientras que le robaban las pocas pertenencias y dinero que tenía en su domicilio.
Atado de pies y manos
Según relató la víctima, se trataba de un hombre de 66 años y nacionalidad española, mientras que otro de ellos, el que llevaba el arma de fuego, le apuntaba al pecho, el otro le amenazaba con una navaja a la par que le gritaban «¿Dónde está el dinero?». Los autores, en vista de que la víctima les decía que el único dinero que tenía era el que había en su cartera, no creyendo al asustado morador de la vivienda, le ataron de pies y manos con bridas a una silla y comenzaron a buscar por las dos viviendas que había en la finca.
La víctima, pudo apreciar que el arma que estaban usando los asaltantes se trataba de una escopeta de perdigones modificada para disparar munición del calibre 32 de su propiedad, que guardaba en la otra casa de la finca y que debieron coger antes de sorprenderle, la misma que se llevaron cuando se marcharon.
Por si fuera poco, antes de abandonar la vivienda los autores con el escaso botín obtenido; apenas 120 euros en efectivo, documentación y tarjetas bancarias, el teléfono móvil y 15 garrafas de aceite de oliva virgen extra, además de una escopeta de cartuchos, los asaltantes amenazaron a la víctima con quemarle la casa si denunciaba los hechos.
Escondido en el monte
Transcurrido un tiempo que la víctima no supo determinar, consiguió desatarse y salió de la casa apresuradamente pensando que sus captores aún estaban por la finca, saltando la verja y huyendo despavoridamente hacia el monte donde finalmente se escondió.
Horas más tarde, cuando la víctima vio la posibilidad de que ya hubiera pasado el peligro, salió de su escondite y se dirigió a la casa. Como no tenía modo de avisar a nadie para pedir ayuda puesto que los autores se habían llevado su teléfono, transitó por la carretera hasta que dio con un camionero a quien le pidió su teléfono para llamar a la Policía Nacional.
Ante tales hechos, se activó el protocolo de delitos violentos establecido para este tipo de ilícitos de especial gravedad, iniciándose una investigación por parte de la Policía Judicial. Las primeras pesquisas realizadas, ya revelaban que podría haber más implicados en el suceso. De hecho, estas gestiones inferían la posibilidad de que entre los implicados hubiera también alguna mujer.
Durante la investigación, también se pudo saber que los autores, habrían intentado utilizar sin éxito las tarjetas de crédito de la víctima en diversos cajeros de la ciudad. En cuanto a la hipótesis de trabajo policial se centró en que, la tarde anterior al suceso, una amiga de la víctima había estado en su casa junto con otras tres mujeres a las que únicamente conocía por su nombre.
Los agentes, tras conocer la identidad de estas mujeres descubrieron que, una de ellas, estuvo recientemente implicada en un hecho delictivo junto con otros varones, también relacionado con un delito de robo con fuerza.
Así, los agentes iniciaron un dispositivo de vigilancia en torno a los investigados y tomaron declaración a las personas que estuvieron la misma tarde de los hechos con la víctima en su domicilio, hallando versiones contradictorias y hechos incoherentes en las narraciones, cerrándose el cerco en torno a estas personas.
Finalmente, con todos los indicios probatorios, tras determinar la implicación de hasta cinco personas implicadas en los hechos; cuatro hombres y una mujer, los agentes orientaron sus esfuerzos en su localización y detención, siendo detenidos cuatro de ellos, dos varones y dos mujeres, en Alicante, y el quinto investigado en la localidad granadina de Zújar, a quien localizaron en las inmediaciones de la estación de autobuses de la localidad.
En los registros domiciliarios practicados, se hallaron tanto el arma de fuego usada por los asaltantes y propiedad de la víctima, como el arma blanca supuestamente utilizada, una navaja de más de 30 centímetros de longitud.
A los arrestados se les imputaron los delitos de robo con violencia e intimidación en casa habitada, robo con fuerza en las cosas en casa habitada, detención ilegal, tenencia ilícita de arma prohibida, estafa y delito leve de apropiación indebida, estos dos últimos, dado otros delitos averiguados durante la investigación y no relacionados con el hecho inicialmente investigado.
Mientras que los cuatro detenidos en Alicante, de entre 19 y 52 años de edad, y nacionalidad española, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Alicante, el detenido en Zújar, de 44 años de edad y de nacionalidad española, fue puesto a disposición de los juzgados de Instrucción de Baza (Granada).