La 'coca amb tonyina' y las brevas: el sabor de las fiestas de Alicante

La fiesta grande de Alicante ya está aquí. Las Hogueras de San Juan ocupan las calles de la ciudad desde este jueves. Como muchas otras festividades, la de les Fogueres tiene su plato típico: la coca amb tonyina (empanada de atún) acompañada de las tradicionales bacores (brevas).

Estas son unas fiestas declaradas de Interés Turístico Internacional que se celebran del 20 al 24 de junio. En estos días, se plantan más de 200 hogueras o monumentos de cartón piedra de temática satírica por toda la ciudad, muy parecidos a las Fallas de la ciudad de Valencia. Los platos típicos forman parte esencial de esta celebración, ofreciendo a los asistentes una muestra auténtica de la gastronomía local.

Es tradicional en la noche de la plantà, en la que se montan los monumentos, degustar esta coca, elaborada con atún, cebolla y piñones, y acompañarla de brevas frescas. En los inicios de la fiesta, la coca amb tonyina se entregaba como premio a los voluntarios que ayudaban durante la plantà, que tiene lugar la noche del 20 al 21 de junio. Con el paso del tiempo, se ha convertido en una tradición que los alicantinos disfruten de este manjar durante los días de fiestas.

Los hornos de la ciudad comienzan a elaborarla desde días antes, y tanto alicantinos como visitantes la consumen durante todas las fiestas, especialmente en las barracas y racós donde se reúnen los festeros.

Elaboración de la 'coca amb tonyina'

Esta coca o empanada se elabora con una masa a base de aceite, agua, anís seco y harina y se rellena de ventresca de atún, cebolla frita y piñones. La combinación de estos ingredientes crea un sabor único, que refleja la rica tradición culinaria de Alicante.

Lo tradicional también de esta noche son las brevas, que en esta época del año viven su momento de apogeo. Con su sabor fresco y dulce, son el complemento perfecto para completar un menú en el que no faltan otros productos típicos de la provincia, todo ello acompañado por los excelentes vinos de la DO Alicante. Cabe destacar la importancia del anís y la mistela durante estos días. Muchos alicantinos mientras soportan un sol de justicia para ver la mascletà se refrescan bebiendo la famosa palometa, una mezcla de cinco partes de agua fresca y una de anís seco.

Así, las Hogueras de San Juan no solo se viven a través del arte y la sátira de sus monumentos, sino también a través de la rica y sabrosa tradición gastronómica que acompaña cada instante de estas festividades. La coca amb tonyina y las brevas frescas son, sin duda, una parte esencial del sabor de las Hogueras junto a los vinos y licores de la provincia.