La sucesión de fracasos del PSOE en Valencia que pueden llevar a Morant a imponer a su candidata a la alcaldía

La ciudad de Valencia es una de las plazas electorales más complicadas para el PSOE. Su alcaldía es un cargo que los socialistas llevan más de tres décadas sin ocupar y, al menos hasta 2027, el panorama será el mismo. En concreto, fue en 1991 cuando Rita Barberá arrebató a la formación del puño y la rosa la vara de mando levantina. A continuación, llegaron las tan sucesivas como contundentes mayorías absolutas de la 'popular' hasta que, ya en 2015, Joan Ribó, de Compromís, la sustituyó.

Durante los ocho años del nacionalista al frente del Ayuntamiento, el PSPV-PSOE ostentó la vicealcaldía con Sandra Gómez, un puesto que, aunque es de gran relevancia institucional, no pudo ocultar el enésimo tropezón en las urnas del partido, que volvió a ser tercera fuerza en 2023 del mismo modo que lo fue en 2015 y 2019.

Para intentar voltear esta situación, la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades y líder de la organización en la Comunidad Valenciana, Diana Morant, no puede dilatar mucho tiempo más la elección de quién será el candidato a la alcaldía en dos años y medio. Puede parecer un horizonte muy lejano, pero los tiempos en política son especialmente complicados y la actual regidora, María José Catalá, cuenta con gran respaldo a su gestión y el viento sopla a su favor.

Borja Sanjuán sería «un parche»

Tras los comicios europeos del pasado 9 de junio, Gómez abandonó la política local para asumir sus nuevas responsabilidades como eurodiputada y cedió el testigo de la portavocía socialista en el Consistorio a su mano derecha, Borja Sanjuán. Si el criterio a aplicar para la designación fuese el continuismo, el síndico le pelearía el sillón de mando a Catalá, pero hay síntomas de que la intención de Morant puede no ser esa.

Uno de ellos es el grado de conocimiento social del que goza Sanjuán, por debajo de su antecesora y de su rival 'popular', un contexto complicado más aún cuando el objetivo es no enlazar otro sonoro fracaso electoral. Por ello mismo, resulta llamativo el aumento exponencial de apariciones públicas que en los últimos meses está teniendo la delegada del Gobierno en la región, Pilar Bernabé. Exconcejal en el Ayuntamiento de Valencia y a día de hoy tercera autoridad de la Comunidad (por detrás de Carlos Mazón y de la presidenta de las Cortes Valencianas, Llanos Massó), puede ser la baza para plantar batalla por la alcaldía.

Hasta la fecha, se había mantenido en un discreto segundo plano, algo, por otra parte, bastante común entre los delegados del Ejecutivo, que salvo por alguna polémica puntual, suelen optar por un perfil bajo en el día a día. No obstante, sus opiniones sobre los asuntos políticos tanto a nivel municipal como autonómico se han multiplicado y su presencia mediática no ha pasado desapercibida.

«Va a muchos más actos que hace un tiempo y, además, va con todo su equipo. No es nada descartable que sea la candidata a la alcaldía», apuntan fuentes municipales consultadas por El Debate, que también consideran que Sanjuán sería «un parche».

Por último, de confirmarse la estrategia de Morant con Bernabé, no sería nueva, dado que sería calcar lo que la propia ministra hizo desde las últimas elecciones regionales, cuando Ximo Puig perdió la Generalitat y su jefe de filas, Pedro Sánchez, la impuso en la federación socialista, llegando, incluso, a suspender unas primarias para las que la exalcaldesa de Gandía ya tenía dos rivales.