Dos chicas se manifiestan en Valencia contra la «persecución» al valenciano
El nacionalismo agita los colegios para intentar imponer el valenciano: «Quieren confundir a la gente»
Una asociación y un sindicato llaman a concentrarse todas las semanas a las puertas de los centros para tratar de impedir la consulta a las familias para que elijan la lengua vehicular en la educación de sus hijos
el nacionalismo vuelve a la carga para tratar de imponer el valenciano en las aulas y lo hace directamente a las puertas de los centros educativos y con la participación de los docentes afines a sus objetivos. Una asociación y un sindicato, beneficiarios habituales de subvenciones públicas durante el Gobierno de Ximo Puig, han llamado a concentrarse cada jueves en el exterior de colegios e institutos para intentar impedir que se realice la consulta de elección de la lengua vehicular en la educación.
«¿Cuál es su preferencia sobre la lengua base de educación?» es la pregunta que deberán responder las familias en una votación que ha sido pospuesta por la dana y para la que aun no hay fecha definitiva para el aplazamiento. El nacionalismo llevaba meses haciendo campaña para que los padres escogiesen la opción del valenciano frente al español, pero la estrategia ha cambiado en los últimos tiempos: ahora directamente quieren impedir que se realice la consulta contemplada en la Ley de Libertad Educativa del Gobierno de Carlos Mazón.
Las últimas semanas, durante el periodo de consulta pública, entidades valencianistas y pancatalanistas se han movilizado para presentar 4.145 alegaciones, de acuerdo con los datos de Plataforma per la Llengua, la «ONG del catalán», que considera que «las consultas propuestas no garantizan procesos democráticos». Otras dos organizaciones afines, Escola Valenciana y el sindicato docente Plataforma per l'Ensenyament Públic (STEPV), son ahora las que agitan los centros escolares en base a la difusión de la idea de que una mayoría dentro del ámbito familiar y docente está en contra de la votación.
«Es evidente que la comunidad educativa rechaza esta ley y la consulta asociada», aseguraba al respecto hace unos días la presidenta de Escola Valenciana, Alexandra Usó y Carinyena, quien añadía que «queremos estudiar en valenciano, que nuestra lengua siga presente en el sistema educativo y llegue al 50 % de las horas lectivas, como piden las voces expertas». Usó y Carinyena es, precisamente, una de las coportavoces de las manifestaciones orquestadas contra Mazón por su gestión de la dana. Además de las concentraciones, su entidad ha preparado una moción de rechazo a la ley y la consulta que puede aprobarse en los consejos escolares de centro y municipales «para seguir sumando fuerzas que paralizan esta normativa».
Tienen sindicatos, partidos, las ampas, directores de centros...Presidenta de Hablamos Español
A su vez, desde STEPV señalan en un comunicado que «es evidente que la comunidad educativa rechaza la consulta a las familias sobre la lengua base y, muy probablemente, las alegaciones se hubiesen incrementado si se hubiera abierto el plazo en período lectivo y no en plenas vacaciones de Navidad». «Por todas estas cuestiones, el Sindicato considera que el conseller (José Antonio) Rovira debe dimitir y el Gobierno valenciano debe cambiar radicalmente sus políticas en materia de educación», señalan, y añaden que no descartan nuevas movilizaciones en la calle para conseguir sus fines.
La profunda penetración en el sistema
En una reciente conversación con El Debate, la presidenta de Hablamos Español reflexionaba sobre la profunda penetración que tiene en el sistema educativo el nacionalismo valenciano y las estrategias que siguen para imponer su relato. «Tienen sindicatos, partidos, las ampas, directores de centros...», apuntaba sobre la capilarización de la que gozan este tipo de organizaciones dentro del sistema educativo.
Cartel de una charla en un instituto de Mislata para apoyar el valenciano, apoyada por el Ayuntamiento socialista
Pero, más allá de su implantación, la responsable de la citada entidad en defensa de los hispanohablantes denuncia que llevan a cabo campañas basadas en mentiras y falacias con las que «quieren confundir a la gente»: «Muchas familias que hablan español van a votar valenciano en la consulta, y lo van a hacer porque les dicen que van a separar a los niños porque no llegan a juntar una clase, o que se van a acabar los libros gratuitos o el material de la biblioteca».
Según Lago, lo que está haciendo el nacionalismo con este tipo de medidas y con sus campañas a favor de votar «sí» al valenciano en la consulta, como finalmente tendrán que hacer, ya que desde la Consejería de Educación se han desestimado las alegaciones, es allanar el camino para cuando la izquierda y el nacionalismo puedan volver a tomar el mando de la Generalitat. «Ellos piensan 'cuando volvamos a gobernar e implantar la inmersión lingüística, les tapamos la boca esgrimiendo los resultados'», lamenta la presidenta de Hablamos Español, que el próximo lunes 13 informará a las familias sobre la consulta en un directo, a las 20.00 horas, a través de su canal de Telegram.
