Así consiguen los fabricantes ilegales de narcolanchas llevar las embarcaciones de Galicia al Estrecho
A pesar de la longitud de las narcolanchas, los narcotraficantes consiguen que lleguen a su destino para realizar transporte de droga e, incluso, inmigrantes
La pasada semana, la Guardia Civil asestó un golpe al narcotráfico al desarticular una banda que operaba en Orense y Pontevedra suministrando motores de alta cilindrada empleados en las narcolanchas. Sin embargo, la operación 'Vodka' –denominada así por los agentes– no es más que la punta del iceberg. Este tipo de embarcaciones, altamente superiores a las que manejan los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, se fabrican en su mayoría en Galicia para ser usadas en el Estrecho. Los casi mil kilómetros que separan lugares como Orense de Cádiz son una travesía larga y arriesgada para los narcotraficantes que toman una ruta alternativa con la intención de eludir las incautaciones.
Fuentes consultadas por El Debate, aseguran que las narcolanchas no viajan por mar, sino que la carretera es la vía elegida para su transporte. Además, apuntan a que el traslado se hace en tráileres que sortean los controles alternando las carreteras españolas con las portuguesas.
De hecho, Portugal cobra una importante relevancia en el tráfico y el menudeo de Galicia. La propia operación 'Vodka' también se llevó a cabo en el norte de Portugal. Concretamente, en Valença de Minho, límitrofe con territorio español.
La gran longitud de las narcolanchas hacen que su transporte no sea sencillo y, mucho menos, disimulado. Por ello, no existe alternativa más pequeña para moverlas a pesar de los riesgos de incautaciones.
Más potentes y pesadas
El término 'narcolancha' no responde únicamente al uso que los traficantes de drogas dan a estas embarcaciones. Lo cierto es que se tratan de vehículos muy distintos a los existentes en el mercado. Sus características hacen que tanto su envergadura, su potencia y su peso sean altamente superiores a las manejadas por los agentes, las denominadas como Zodiac. Concretamente, estas lanchas pueden llegar a superar los 100 kilómetros por hora y es ilegal su fabricación desde que el Gobierno lo prohibiese hace varios años.
En España, el Gobierno prohibió su fabricación en el año 2018. Aunque su ilegalización ha conseguido que se produzcan muchas menos, los narcotraficantes han encontrado la manera de manejar talleres ilegales donde ponerlas a punto.
Sus fabricantes lo hacen de manera clandestina y, generalmente, en tierras gallegas. En el año 2022 se produjo una gran operación que incluyó una vigilancia durante meses de naves situadas en la frontera entre Galicia y Portugal.
La pasada semana, la Guardia Civil llevó a cabo seis detenciones en el marco del operativo anteriormente mencionado. En el mismo participaron más de cien agentes.
La organización desarticulada se dedicaba a suministrar motores de alta potencia que grupos de narcotraficantes del sur de España usaban para sus transportes en el Estrecho de Gibraltar y en aguas internacionales. Además del tráfico de droga, las mismas embarcaciones eran usadas para el traslado ilegal de inmigrantes desde África hasta la península.