Para el 'National Geographic', la central hidroeléctrica más bonita de España está en Galicia
Una reforma reciente incorporó el uso de pizarra natural para adaptarse al estilo tradicional de la región
Las centrales hidroeléctricas, más allá de su función de generar electricidad de forma sostenible, suelen destacar por su integración en el entorno natural.
Galicia, con su riqueza hídrica y paisajística, es hogar de algunas de las infraestructuras más emblemáticas de este tipo. Entre ellas, la Central Hidroeléctrica Pontenovo, ubicada en Orense, ha sido reconocida por National Geographic como una de las más bellas de España. Este reconocimiento se debe tanto a su valor arquitectónico como al entorno que la rodea.
Armonía entre funcionalidad y belleza
«En las profundidades de Orense, rodeada de naturaleza exuberante, mucha historia y aldeas recónditas, se encuentra la Central Hidroeléctrica Pontenovo, una de las más bellas del país dada la ubicación en la que se encuentra», así la presenta National Geographic en el artículo que le dedica.
Situada en un meandro del río Návea, afluente del Bibey, que a su vez desemboca en el Sil y este en el Miño, esta central ofrece un ejemplo perfecto de armonía entre funcionalidad y belleza.
Puesta en funcionamiento en 1952, la central ha sido testigo de más de medio siglo de historia, proporcionando electricidad desde su privilegiada localización en el término municipal de Puebla de Trives.
Según destaca el artículo de National Geographic, «desde el Mirador de la Pena de la Anduriñeira, justo en el otro margen del río, puede tomarse una de las imágenes más bellas del lugar y pararse a contemplarlo». Este mirador, junto con la ruta que conduce a la central, permite al visitante disfrutar de la belleza natural de la zona.
Arquitectura en Sintonía con el Paisaje
La central no solo es conocida por su ubicación, sino también por su diseño. Una reforma reciente incorporó el uso de pizarra natural para adaptarse al estilo tradicional de la región. Esta decisión, según el artículo, «respeta el tipo de construcción tradicional de la zona, visible en lugares como Navea, Peites o Trives».
El camino hacia Pontenovo es en sí mismo una experiencia única. Partiendo de Puebla de Trives, el trayecto pasa por Ponte Navea, una aldea envuelta en una fraga espesa y cargada de historia. «En ella, algunos vestigios romanos, como el Ara de Villanueva, o los sequeiros mejor conservados de Galicia, donde se secaban las castañas de esos bosques, invitan a caminar despacio y empaparse del paisaje».
El entorno que rodea la central, con bosques de castaños centenarios, cascadas y aldeas rehabilitadas, convierte este lugar en un paraje ideal para quienes buscan un contacto profundo con la naturaleza.
Lugares como San Juan de Río, con el bosque de As Reboleiras do Navea, completan la experiencia, haciendo de la visita un recorrido inolvidable. «Es importante no perder detalle del entorno. La belleza del lugar también viene dada por la senda que rodea la central».
Y es que, la Central Hidroeléctrica Pontenovo no es solo una infraestructura funcional; es un símbolo de la capacidad que tiene Galicia para combinar sostenibilidad, historia y belleza en un único lugar.