Unos tripulantes del buque que transportaba cocaína, solicitan residencia mientras dure el juicio en Vigo
Los 14 tripulantes fueron puestos en libertad durante la celebración del juicio, al extinguirse el plazo legal máximo para estar en la cárcel sin que haya sentencia condenatoria
Los tripulantes extranjeros del buque MV Karar han solicitado un permiso extraordinario de residencia temporal en España, en vista de que el macrojuicio por el transporte de droga se pueda alargar hasta el año que viene y sin autorización legal de residencia y trabajo no pueden desempeñar labores remuneradas, alquilar vivienda o abrir una cuenta bancaria.
Las fuentes de la defensa han confirmado que este trámite se hace al amparo de la ley de extranjería, que contempla la concesión de este tipo de permisos en circunstancias excepcionales, y entienden que los procesados pueden acogerse a esa excepcionalidad. Éstos se encuentran en situación de libertad, con alojamientos temporales gestionados a través de instituciones sociales, pero sin arraigo, sin familia y sin posibilidad de trabajar legalmente.
De hecho, la ley contempla que «la Administración podrá conceder una autorización de residencia temporal por situación de arraigo, así como por razones humanitarias, de colaboración con la Justicia u otras circunstancias excepcionales que se determinen reglamentariamente».
Por su parte, la Audiencia ha trasladado su petición a la Subdelegación del Gobierno que, a su vez, ha dado traslado a la Dirección General de Migraciones, dependiente del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
Cerca de 4 toneladas de cocaína
El Kara fue abordado en abril de 2020 cuando se dirigía a Vigo con 3,8 toneladas de cocaína. Sus 14 tripulantes, 5 ciudadanos de Bangaldesh y 9 de Nepal, estuvieron 4 años en prisión provisional y, durante la celebración del juicio, han sido puestos en libertad al extinguirse el plazo legal máximo para estar en la cárcel sin que haya sentencia condenatoria.
Todos ellos reconocieron ante el tribunal que sabían, al salir de Panamá, que el Karar se dirigía a recoger un cargamento de cocaína frente a las costas de Colombia, y luego pondrían rumbo a la ría de Vigo.
La Fiscalía pide inicialmente para ellos 13 años y medio de cárcel, y dos multas de 400 millones de euros, como autores del delito de narcotráfico y del delito de integración en organización criminal.
La misma pena solicita para el gallego José Manuel B.G., que también viajaba a bordo del Karar con el fin de controlar la droga durante el periplo y quien también reconoció los hechos.