Naturgy invertirá 500 millones en un proyecto «estratégico» en Galicia: una central de bombeo

Naturgy invertirá 500 millones de euros en la construcción de una nueva central hidráulica de bombeo reversible en el río Miño, ubicada en una zona en la que limitan las provincias de Pontevedra, Orense y la frontera con Portugal. El proyecto utilizará el embalse de Frieira y se basa en una tecnología que intenta combatir el principal problema que presentan las energías renovables: su intermitencia, que dependen de factores meteorológicos.

La empresa energética explica que esta actuación «se encuentra en fase de trámite concesional ante la Confederación Hidrográfica Miño-Sil» y que se trata de una iniciativa que se desarrollará a «largo plazo», con un horizonte de desarrollo y construcción estimado en 9 a 10 años. La central contará con una capacidad instalada de 485 megavatios y será una infraestructura en su mayor parte subterránea, minimizando su impacto visual y ambiental.

La propuesta de Naturgy, que también está en tramitación ante el Ministerio para la Transición Ecológica, utilizará el embalse de Frieira, ya existente, como balsa inferior y plantea la construcción de una balsa superior, situada en el municipio de Crecente (Pontevedra). Naturgy asegura que «se estima una inversión inicial de 500 millones de euros, consolidando a esta iniciativa como un proyecto estratégico para el sistema energético español».

La solución de almacenamiento de energía que se plantea en este documento inicial es una central reversible, denominada Filgueira. La documentación técnica recoge que «esta configuración se considera una tipología óptima para una central hidráulica reversible con escasa huella en el entorno, eficiencia energética e impacto positivo en términos globales de sector eléctrico».

Funcionamiento

El proyecto consiste en la ejecución de una central hidráulica reversible. «Este tipo de centrales hidráulicas necesitan básicamente dos embalses situados a cotas significativamente diferentes, unidos mediante un túnel o conducción a presión que contenga una central con turbinas reversibles, es decir, que además de turbinar el agua de la cota superior a la inferior generando electricidad, puedan también funcionar como bombas que transportan el agua en sentido inverso», afirma la documentación.

En las horas de mayor demanda de energía eléctrica, la central turbinaría el agua de la balsa o depósito superior al inferior (embalse de Frieira), generando electricidad. Mientras que en las horas valle o de menor demanda de emergería eléctrica, se aprovecharía la electricidad para bombear agua del embalse inferior al depósito superior, pudiendo así almacenar la energía excedente de producción en forma de agua embalsada, que podrá ser devuelta de nuevo rápida en puntas de demanda de energía eléctrica.

Naturgy señala «la importancia del almacenamiento energético en el proceso de descarbonización». La compañía considera que las recientes modificaciones legislativas son «un impulso clave para la transición hacia un modelo energético sostenible y eficiente». Hace referencia al nuevo marco legislativo establecido en la Ley de Aguas en España. Esta reforma prioriza las centrales hidroeléctricas reversibles al incluirlas como un nuevo uso del agua, denominado almacenamiento hidráulico de energía, según detalla la compañía.