Cien años de la inauguración del campo de fútbol de Electromecánicas

No, no se trata de una variante del programa dedicado a la agricultura y pesca que forma parte de la identidad de la programación de Canal Sur TV como servicio público. Hablamos de Tierra y Agua, una publicación cordobesa bajo la denominación de Revista Gráfica Deportiva y cuyo primer número salió a la venta el 17 de septiembre de 1924, hace cien años. El Stadium América se había inaugurado el 23 de mayo de 1923 en terrenos ubicados a la espalda del antiguo Cuartel de Artillería de la avenida Medina Azahara (hoy sede de Sadeco. El fútbol (o foot-ball, en la época) estaba tomando una gran pujanza a nivel internacional, y Córdoba no estaba ajena a su cada vez mayor atractivo para los públicos de la época. En su primer editorial, dejaba la publicación dirigida por Antonio Carmona Contreras su filosofía: «LABORAR POR EL ENGRANDECIMIENTO DE CÓRDOBA DEPORTIVAMENTE» (sic). Faltaban cinco años para la disputa de la primera liga (febrero a junio de 1929) que se adjudicó el Foot-Ball Club Barcelona y cuyo mejor portero fue el que alcanzaría categoría de mito: Ricardo Zamora. En su primera cita con lectores y aficionados, la noticia de páginas centrales era la inauguración días atrás y disputa del primer partido en el campo de Electromecánicas. El titular era harto explicativo (y largo): «En terrenos de la Sociedad Española de Construcciones Electro-Mecánicas, se inaugura un campo de foot-ball, y vence el “Club Deportivo Egabrense» por 3 goals a 0 al «Electro-Mecánica F C».

«La inauguración de un nuevo campo de foot-ball en las afueras de Córdoba, nos ha demostrado plenamente que e nuestra capital este deporte toma carta de naturaleza» (…) «El nuevo campo, denominado “Stadium Electro-Mecánica», es un buen alarde del deportivismo de que están inculcados sus iniciadores, que al ver hoy su obra coronada por la realidad, ven colmadas sus generosas aspiraciones de trabajo pro-deporte«. Presentaba el nuevo campo unas dimensiones de ciento cuatro metros de largo por sesenta y cinco de ancho “quedándole una distancia de un metro cincuenta centímetros desde la línea de toque, a la valla que circunda el terreno de juego“. Y la puñetera costumbre que persigue a esta ciudad desde la época de la construcción de la Puerta del Puente: la eternización en las obras y que cuando algo se inaugura…NO está terminado. Ojo al dato: “Inaugurado el campo aun sin terminar, por no querer dejar pasar más fechas, se han construido provisionalmente dos entradas, preferencia y general que reunen buenas condiciones de comodidad; localidades que más adelante serán sustituidas por otras definitivas, colocándose en la primera una fila de palcos, y en la segunda, una amplia gradería de material con cinco peldaños. Están aún en construcción las casillas de alojamiento de equipistas, que serán dotadas de todo lo necesario, así como un amplio botiquin de urgencia, que tendrá un completo equipo de material quirúrgico. El ambigú se dotará de acondicionadas cocinas y se construirá un salón-comedor para mayor comodidad de los equipos visitantes. Lo que hace suponer que una vez terminados estos importantes detalles, el nuevo Stadium, lo será modelo en su clase.» Eso sí, el palco para autoridades e invitados estaba perfectamente terminado.

En la crónica del encuentro disputado abundan los anglicismos, tan propios a este deporte en sus inicios, como llamar reporters a los fotógrafos, team al equipo, shoot al disparo, goal-keeper al portero, backs a los defensas y goal al protagonista, a la salsa del fútbol. Se da fin al encuentro, con la victoria de los egabrenses por 3 a 0, “que si tuvo momentos distraídos, en general fué soso“, adjudicándose la copa en disputa.

Tierra y Agua, la revista gráfica deportiva, ponía sobre la mesa su filosofía de manera clara, clarita, sentando las bases de lo que ha sido una constante en la prensa deportiva venidera: “Quizás notes la falta en este semanario de grandes cualidades literarias; pero en su defecto encontrarás la bondad de su doctrina. ¿Cuál? Laborar en nuestra capital por el desarrollo del Sport. ¿Cómo? Aplaudiendo lo que tal merezca, censurando con toda la dureza de una despiadada crítica, a quien intentare desmoralizar el Deporte“. Pues anda que no ha cambiado el cuento en la prensa deportiva en estos 100 años transcurridos.